Hace unos meses pudimos ver unas imágenes robadas del set de rodaje de Medianoche en París, en la misma capital francesa.
Ahora, por fin, podemos ver el tráiler de la última película de Woody Allen, ese director al que se le reconoce más y mejor fuera de su país que en la meca del cine.
Tanto es así, que la película se estrenará en Estados Unidos el 20 de mayo, en cines seleccionados.
Aunque siempre se comenta que todo actor y actriz que se precie ha de participar en alguna de sus películas, para ser más listo y mejor visto.
Es el caso de Owen Wilson, un actor que de serio tiene más bien poco, y que protagoniza, junto a Marion Cotillard, Kathy Bates, Adrien Brody y Rachel McAdams esta nueva incursión del director neoyorquino en una ciudad europea.
Está claro que aprovecha cada una de estas ocasiones para pasearnos por los lugares más tópicos de cada una de ellas, como ya vimos en sus aventuras barcelonesa y londinense, pero hace gracia ver qué visión de estas ciudades tiene Allen, acostumbrado a retratar la omnipresente Nueva York de sus amores.
Y si en Vicky Cristina Barcelona teníamos a la pareja de moda en el cine español, en esta ocasión tenemos a la reina de Francia como actriz invitada en la película.
No, no es que hayan dejado de lado aquello de la república, sino que Carla Bruni, la señora del presidente, retomará su carrera como artista del celuloide para hacer una aparición de la mano de uno de los directores más alabados en ambos lados de los Pirineos.
Ya comentó mi compañero Daniel que la primera dama gala puso de los nervios a Allen, debido a las veces que se tenían que repetir algunas escenas en las que ella intervenía, pero todo sacrificio es poco.
Para ella, por tener el honor de actuar bajo las órdenes de tan querido realizador, y para él, por tener un lugar preferente para rodar una película donde el amor, a su estilo, es tan protagonista como los actores.
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