Cinco películas en diez años es el asombroso devenir de la saga A todo Gas en los cines de todo el mundo.
Las chicas que dejan sin aliento, las espectaculares secuencias de acción y persecuciones y el tener muy claro qué clase de producto están haciendo con la saga protagonizada intermitentemente por Vin Diesel y Paul Walker.
El 29 de abril podremos ver Fast Five, quinto episodio de la serie en la que contarán con un fichaje estrella: Dwayne Johnson.
Justin Lin es de nuevo el director tras las cámaras.
La premisa del film arranca con el expolicía Brian y su chica, que llevan demasiado tiempo cruzando fronteras para huir de las autoridades.
Ahora, acorralados en Río de Janeiro, tienen que realizar un último trabajo para ganar su libertad.
Montarán su equipo de corredores de élite y tendrán que enfrentarse a un hombre de negocios corrupto que los quiere muertos.
Como no podía ser de otro modo, su ex socio Dom volverá a ayudarles una vez más.
Su gran problema en esta ocasión se llamará Luke Hobbs, un duro agente federal que jamás falla en la caza de fugitivos.
Llama la atención que Elsa Pataky dejase un papel protagonista en la adaptación de El Capitán Trueno para participar en esta película, especialmente porque su papel debe ser tan minúsculo que ni siquiera está apareciendo en la campaña promocional de la cinta.
Muy mal, Elsa.
Luego te preguntarás por qué, a pesar de tu extraño pero cierto estatus de estrella, nadie sabe qué peliculas has hecho en los últimos, digamos, tres años.
Pese al desembarco de los nuevos fichajes, Fast Five tendrá complicado superar en la taquilla a las muy exitosas anteriores entregas de la saga automovilística por excelencia: 207, 236, 158 y 353 millones de dólares son las cifras que han recaudado respectivamente cada una de las películas en todo el mundo.
¿Cuál será el límite para esta, reconozcámoslo, espectacular apuesta de Universal Pictures? En unas semanas tendremos una respuesta.
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