Cuando Moisés bajó las tablas de los diez mandamientos del Monte Sinaí, parece que se olvidó de leer el decimoprimero: Amarás y honrarás a Pixar sobre todas las cosas.
Y es que, ahora que estábamos empezando a perder la fe en la compañía por esa chorrada sacacuartos que será Cars 2 (que muchos iremos a ver por el corto inicial de Toy Story en Hawai), nos llega una nueva imagen conceptual de su nueva película, Brave, bastante más interesante que las vistas hasta ahora.
Y es que aquí por fin podemos ver a nuestra heroína, Merida, arco en ristre y montada en su caballo, en lo que parece que será una historia más seria de lo que la compañía nos tiene acostumbrados (y ya es decir).
No iba a ser la única novedad, ya que esta iba a ser la primera película de la compañía dirigida por una mujer, Brenda Chapman (El Príncipe de Egipto), pero Pixar decidió cambiarla por Mark Andrews, el muy talentoso director del corto One Man Band.
Por supuesto, asociaciones en defensa de la mujer ya han saltado de sus asientos exigiendo la cabeza de los directivos de Pixar sin darse cuenta de que estas cosas pasan todo el tiempo en la industria del entretenimiento.
Lo importante es hacer una buena película, Chapman sigue siendo una de las guionistas del filme y, pese a la decepción inicial, supongo que todos están centrados en intentar hacer una nueva obra maestra.
En Brave seguiremos a Merida, una hija de reyes que, sin embargo, preferiría dejar su impronta como una gran arquera.
Después de una pelea con su madre, Merida hace algo insensato que hace peligrar tanto el reino de su padre como la vida de su madre, por lo que decide hacer las cosas bien y luchar contra las fuerzas de la naturaleza, la magia y una oscura y antigua maldición.
Creo que es facilmente comprensible por qué estamos todos mucho más excitados por una chica luchadora escocesa que se enfrenta a magia y lucha por su destino que por coches que corren y espían en sus ratos libres.
El filme llegará a Estados Unidos el 22 de Junio, unos meses antes que Monsters University.
La alegría de ver dos películas de Pixar el mismo año solo es comparable con la de ver el arte conceptual de esta Brave.
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