Robert Pattinson se hará mayor, cinematográficamente hablando, cuando se estrene Agua para Elefantes el próximo 6 de mayo.
La adaptación del best seller homónimo de Sara Gruen permite a la estrella de la saga Crepúsculo rodearse de dos actores oscarizados como Reese Witherspoon y Christoph Waltz en este drama romántico de época.
Francis Lawrence, especializado hasta ahora en el cine de acción con Soy Leyenda y Constantine, es su sorprendente director.
El protagonista de este romántico y probablemente trágico relato es un anciano de 90 años que recuerda su vida durante la Depresión norteamericana, cuando encontró trabajo en un circo ambulante de tercera como cuidador de los animales, viviendo su primer (y último) gran amor.
Un joven domador de elefantes, la bella estrella del circo y su sueño son las tres puntas del triángulo romántico sobre el que versarán buena parte de los acontecimientos de uno de los films más preciosistas y estéticos de los primeros meses del 2010.
No sorprende demasiado descubrir que la adaptación del film pertenece al cotizado guionista Richard LaGravenese, experto en llevar a la pantalla grandes éxitos de la literatura romántica reciente como Los puentes de Madison, Post Data: Te quiero o El amor tiene dos caras, entre otros.
Queda claro que la Fox no se anda con chiquitas con su nueva película.
Por si los varios trailers no hubiesen sido suficientes para hacernos una idea de qué podemos esperar de la película, ahora tenemos a nuestro alcance hasta ocho escenas de la película que confirman mi teoría de que, salvando las distancias, estamos ante un intento de heredera de Moulin Rouge.
Faltarán los números musicales y la bizarrez made in Baz Lurhman, pero los parecidos entre ambas propuestas son de lo más palpable.
Y si no me creéis, comprobadlo vosotros mismos.
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