Ryan Reynolds está en racha. Tras probar que puede resultar un actor más que convincente en Buried y que puede atraer sin problemas al público femenino en la comedia romántica La proposición (claro que ahí la gran parte de la “culpa” la tuvo Sandra Bullock), el actor canadiense tiene con Green Lantern la oportunidad de demostrar que también puede a llevar a hombres y / o jóvenes espectadores a las salas de cine.
El 29 de julio (un mes antes en América) podremos ver si Reynolds tiene lo que hay que tener para convertirse en una superestrella. Aún es pronto para hacer pronósticos al respecto, pero lo cierto es que Green Lantern ha tenido problemas de imagen y prensa desde que sacasen su primer trailer hace ya casi seis meses.
Ya sea por lo liviano de su tono o por su exageradamente plástica puesta en escena, muchos fans se llevaron las manos a la cabeza con las primeras imágenes de la adaptación de las aventuras de este superhéroe sacado de la factoría DC Cómics (la misma que creó emblemas mucho mayores como Batman o Superman). Superado el bache inicial, Sony ha trabajado incansablemente por mejorar la imagen del proyecto y lo ha conseguido…. a medias. Aunque los clips y anuncios han ido mejorando sensaciones (los que estrenamos en este artículo son buena muestra de ello), hay algo que sigue sin convencer del todo en esta película dirigida por Martin Campbell, más conocidas por sus exitosas películas para la saga protagonizada por el agente 007 (concretamente Goldeneye y Casino Royale). A favor de Campbell podemos decir que no es lo mismo adaptar las aventuras de un hombre que se hace justiciero gracias a la herencia de sus millonarios padres asesinados que a la de un piloto de aviación que se convierte en guardián del universo cuando recibe un anillo mágico en manos de un extraterrestre: Green Lantern es un proyecto más raruno y merece un poco más de paciencia. Al menos hasta que la veamo, ¿no?Leer más sobre Green LanternVía
