Por lo visto no se puede hacer una película de boxeadores con cierto glamour, con una historia atrayente, con unos momentos repletos de acción y sin poner drama por detrás. Los que trabajan en esto del boxeo lo deben pasar fatal, porque no hay ni un filme en el que no haya hermanos con ínfulas de grandeza, padres alcohólicos o momentos al borde de la muerte.
Ya sabéis, la alegría típica de películas como Warrior.Supongo que Warrior quiere optar al Oscar, pero se va a dar con un canto en los dientes. ¿La historia? La del hijo de un boxeador alcohólico que vuelve a casa para ser entrenado por su padre para la competición en un torneo de artes marciales mixtas, algo que afectará especialmente al hermano de nuestro protagonista.
Hala. Si no han metido drogas y muertos me decepcionará mucho. Y entre los actores que intentarán tener suerte en la temporada de premios tenemos a Tom Hardy (Origen), Jennifer Morrison (vista ultimamente en How I Met Your Mother) o Nick Nolte (Aflicción). El 9 de Septiembre se estrena en EEUU y muchos ya comentan que, de puro típica, va a morir antes siquiera de haberse podido ver en pantalla grande. No me extrañaría lo más mínimo.Leer más sobre WarriorVía