Ángel llega al plató de Gran Hermano 11 por fin.
Es muy raro todo esta noche, porque la salida de la casa nos la han puesto grabada, la hemos visto y en un momento entraba Ángel por la puerta… qué cambios hacen y qué cutres quedan.
Ángel está que se sale (no es para menos).
Mercedes le dice que él es desde el principio en la web de Gran Hermano el que ha ido el primero en el ranking.
Y empiezan recordando aquellos días del principio en los que tenían que hacer que él y Lis eran novios.
Él ya ni se acuerda de aquello… y mira que se llevaron mal.
Por cierto, vuelvo a ver que Ángel está bizco ¿cómo no lo había notado hasta ahora? Ángel dice de todo esto que se ha visto “un poquillo ridiculo”.
Es muy sincero.
Hans no lo ha saludado, porque básicamente son todos unos rencorosos, y él dice que le molestó mucho que cuando él salió le dijo que se alegraba mucho de que saliera.
Y ponen sus broncas con Hans, con el que se llevaba muy bien al principio y al final a matar…Y llega el momento Arturo.
Todas las veces que Ángel lo criticaba, por su relación con Carol, con Indhira y con Tatiana… y las frasecitas de Arturo, Ángel se avergüenza de sí mismo cuando se oye decir “tengo unas ganas de que lo echen a la puta calle…”.
Mercedes quiere saber por qué no se lo dijo a la cara, y Ángel dice que es por lo mismo por lo que él no se lo decía a él, y porque quería evitar una movida gorda.
Arturo le contesta que no le puede decir nada porque “me ecanta tu madre, tío”.
Al final serán amigos y todo.
Y sobre Gerardo, con el que ya dijo que quería hacer las paces, sigue diciendo que estaba muy harto de algunas cosas que hacía, como colocarse para que las cámaras lo vieran mejor, y que no le pareció bien que le echara en cara todo lo que había hecho por él.
Gerado le contesta que felicidades y que ya hablarán.
Al final se ven sus buenos momentos, llega Ivan Madrazo y le da la llave del maletín.
Iván además quiere hablar “esta llave no sólo abre este maletín, aporta algo muy importante, la ilusión de toda la gente que nos ha votado para ser gandor”.
Y con estas bellas palabras termina la crónica de la noche del ganador de Gran Hermano 11.
