Desde luego, la actriz Megan Fox es única a la hora de “hacer amigos”.
Por si no tuvo bastante con poner a parir al director de Transformers hasta el punto de compararlo con Hitler, y con que sus propios compañeros de rodaje escribieran una carta abierta donde detallaran lo mal que se suele comportar Megan con la gente con la que trabaja, ahora la actriz ha decidido hacerse algunos enemigos en el mundillo de la música, empezando por atacar un poco a la propia Britney Spears.
La cosa surgió mientras Megan hablaba de su aerofagia, perdón, quise decir aerofobia, es decir, su pánico a viajar en avión.
Al parecer la chica empezó a sufrir este mal a los veinte años de edad.
Que creo yo que coincidiría con el momento en que su carrera comenzó a funcionar ya que antes dicha carrera era prácticamente inexistente y por lo tanto no tenía mucha necesidad de andar volando de un lado para otro.
Como la aerofagia, perdón, otra vez, la aerofobia de Megan iba cada vez a más, hasta el punto de que no sabía si sería capaz de contenerse para no tener un ataque de pánico en pleno vuelo, ella ideó su propio método para calmarse:Sé que no es mi destino morir escuchando un álbum de Britney Spears, así que siempre me pongo eso en mis auriculares cuando estoy volando porque sé que el avión no se estrellará si escucho a Britney – Megan Fox (traducción libre).
Una lógica aplastante.
Esta chica siempre la lía cada vez que abre la boca.
Decía alguien que el silencio y un vestido negro visten a la mujer de inteligencia.
Hay que ver lo mona que estaría Megan con uno de sus vestiditos sexies y calladita.
Muy calladita.
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