Definitivamente parece que a Fringe le ha sentado muy bien la pausa invernal y, desde su retorno, no para de brindarnos capítulos de lo más interesantes.
Después de la surrealista entrega musical de la semana pasada, las cosas volvían a la normalidad con este Northwest Passage.
Y es que hay que recordar que Peter había desaparecido después de que Walter le contase la verdad sobre su origen.
Al principio del capítulo lo encontramos en uno de esos típicos bares de gasolinera estadounidenses.
Y, como no podía ser de otro modo, con una camarera bastante mona.
Y la cosa funciona entre Peter y ella hasta tal punto que ella le dice que le verá más tarde en el motel del hijo de Walter.
Pero nunca aparece.
Pensando que le han dado plantón, Peter decide seguir su camino.
Pero cuando está abandonando el pueblo se da cuenta de que hay bastante policía en la gasolinera.
Y es que la camarera ha desaparecido.
Al principio, las autoridades piensan que Peter es bastante sospechoso.
Pero encuentran el cadáver de la joven y Peter les pregunta si falta una parte del lóbulo frontal.
Y así es.
Teniendo en cuenta que tiene una buena tapadera y que es del FBI, pasa de sospechoso a colaborador.
De esta forma, explica a los policías que Newton y sus hombres le están persiguiendo y que están robando los recuerdos de la gente para encontrarlo.
Algo difícil de creer.
Pero pronto el compañero de una policía, que sabia donde se alojaba Peter, también desaparece y la jefa de las autoridades empieza a creerle.
Pero lo que quiere saber es como encontrar de nuevo a su compañero (profesional y al mismo tiempo sentimental).
Para eso Peter se inventa una experiencia, muy parecida a las que normalmente hace su padre, para saber donde puede estar.
Se trata de una granja medio abandonada que Peter y la policía van a ver.
Y allí se dan cuenta de que, en realidad, no se trataba de Newton y sus hombres sino de un asesino en seria que mataba a jóvenes chicas.
Y el policía, que consiguen salvar, se encontraba en el lugar equivocado en el momento equivocado.
Parece que la teoría de Peter no era correcta.
Pero al volver a su motel, se estira un rato para dormir y se encuentra cara a cara con Newton.
Bueno con Newton y sus jefe que no es otro que…Walter de la otra dimensión, su verdadero padre.
Suponemos que habrá venido a buscarle.
Pero seguramente el Walter de aquí no se lo pondrá fácil ya que por fin saben donde esta Peter.
Un gran episodio que resulta un ejemplo perfecto de cómo mezclar con acierto y sutileza la trama de la investigación semanal con la historia más profunda.
El espectador no sabe si se trata de la trama de Peter o de un caso más normal.
Esperemos que el Season Finale doble mantenga este buen nivel que ha conseguido la serie.
Leer más sobre FringeFotografía