Sobre la orientación sexual de Aída Nizar se ha especulado muchísimo.
No sabemos si en sus conversaciones con Dios le habrá dejado claro si le gustan los hombres o las mujeres, o las dos cosas, pero nosotros tenemos la cabeza (por no decir otra cosa…) hecha un lío.
En estos últimos días, una ex socia suya, que asegura que le debe bastante dinero, ha declarado en el programa Sálvame que a la ex Gran Hermana más peculiar de la historia del programa le van también las chicas aunque lo niegue, pero que simultáneamente ha mantenido relaciones con personas influyentes de la esfera política a los que podría tener amenazados con sacar imágenes a la luz si no la tienen contenta.
Las declaraciones son tan graves que hay que cogerlas con pinzas, pero no me negaréis que parece el argumento de una película de Almodóvar.
Y en medio de todo ese follón, aparece esta foto, en la que Aída se besa con una rubia bastante atractiva en mitad de la pista de una discoteca.
El beso no parece ser mucho más de un piquito, pero sí que parece provocador cuando ella misma afirma que está harta de que la gente diga que es lesbiana, cuando no lo es.
Aunque, ¿qué sería de Aída sin ese aire provocador tan insoportable?Lo que no me cabe en la cabeza es como la rubia le puede dar un beso a esta mujer: una chica que habla en tercera persona, que habla con Dios, que no tiene ningún tipo de miramiento para con los demás y que se expresa con esa prepotencia no me parece una persona a la que demostrarle mucha atracción… Llamadme exigente…Aída Nízar pillada besándose con una mujer en una discotecaFotografía