Ayer Belén Esteban de motu propio se sentó en el polígrafo (a las tantas de la madrugá, por cierto) para demostrar que todo lo que ella dice sobre Jesulín es verdad y que lo que Jesulín dice es mentira.
Llevaba todo el día con pruebas de polígrafo, así en plan muy serio y al empezar Sálvame dijo que con eta prueba gente iba a la cárcel, así que no había nada más que decir.
Y depués de tragarnos la caja de Lydia Lozano (muy pesada, por cierto) llegó el momento Esteban.
El momento de la noche.
Para empezar le preguntaron que si Jesulín la había llamado desde el hospital tras su accidente para pedirte que fueras a verle y dijo que “si”.
El polígrafo dijo que era verdad.
Y ella añadió que le apetecía añadir algo.
“¿Qué me apetece? ¿Lo puedo decir? ¡Jódete!”.
Dijo la verdad todo el rato, el polígrafo decía siempre que no mentía.
Así que no se negó a que Jesulín hablase con su hija por teléfono mientras estaba hospitalizado, y añadió cosas.
“A los dos días me llamó llorando desde la UVI.
Quiero dejar claro que en ningún momento lo llamé hijo de puta, el que me pidió que fuera a verle fue él y el que no me dejó fue Humberto Janeiro.
” Y sí, señores, estamos hablando de cosas que pasaron hace diez años.
Increíble pero cierto.
También es verdad que Jesulín le dijo aquello de que si hubiera ido a verlo al hospital se habría casado con ella.
“Estaba también toda mi gente, amigas de mi madre, enfermeras del hospital y nuestra gente.
Pero bueno, he tenido que venir al polígrafo para que se sepa realmente la verdad”, y contó cómo fue todo.
“Yo estaba sentada, cuando entró se confundió de puerta y se fue al de enfrente, de primeras entró mal.
Entró, yo estaba sentada en una silla al lado del cristal, vino con Matías, me dio un abrazo, me puse a llorar como una loca y me dijo, ‘lo siento mucho, se van los mejores’.
Matías me dio un abrazo, Jesús le regañó como en broma por abrazarme.
Luego estábamos sentados en un sillón, mi madre, él, yo, mi cuñada Sandra, su madre, mis hermanos, el mayor no porque había salido, Mariví, vamos, mi gente.
Entonces de repente dice, hablando de la niña, que nunca me perdonaría en la vida que nunca hubiera ido a verle al hospital cuando el accidente.
Yo me quedé de piedra, estaba tan bloqueada ese día que me sobrepasó.
Él ya estaba casado, lo siento, si te han contado otra historia que te cuenten la verdadera como he hecho yo hoy”.
Y Belén continúa diciendo que se quedó bloqueada, “Me quedé bloqueada y dije que si no había ido era porque su padre me lo prohibió, porque había mucha prensa y parece ser que se avergonzaban de mí.
Les daría vergüenza que me viera la prensa con mi hija o que se despertara algún sentimiento.
La madre de mi cuñada, que vive en León, le dijo a mi cuñada que si teníamos algo.
Pero bueno ya ha salido la verdad y no quiero decir más”.
¿Qué más? Ah sí, nunca ha prohibido que Jesús viera a la niña, lo ha llamado mucho para que fuera a ver a la niña, que la Campa le dijo que tenía motivos para quitarle a la niña, que le ha hecho muchos feos a Andrea (menuda es la Campa, por favor) “los feos que ha tenido mi hija, que son bastantes, mi hija es menor y me encantaría contarlo, pero bueno algún día, que los feos que ha hecho a mi hija, no les deseo que se los hagan a tus hijos, porque mi hija los adora y son niños, pero que como madre los sintieras”.
Y ya está, no me extiendo más.
Sólo resumir diciendo que todo es verdad, que la trataban mal en Ambiciones, que se avergonzaban de ella, la llamaban cualquiera, que no se drogaba, que Jesús la llamó para que no se casara con Fran, que Andrea llamó al 112 porque le dio la gana y que no se siente traicionada por Jesús.
