No podía dejar de contar este cotilleo sobre Robert Pattinson y Luna Nueva, y es que, si ayer casi nos morimos con las fotos de Robert sin camiseta, y después con las de Robert sin camiseta besando a Kristen, hoy nos enteramos de que no es oro todo lo que reluce.
Según han contado algunos de los extras del set de Luna Nueva en Montepulciano, uno de los maquilladores le pintó a Robert con aerosol la marca de los abdominales, era algo que todos podían ver desde donde estaban.
Esos abdominales que ayer nos derritieron y nos alegraron la mañana eran pintados.
¿Y qué? pregunto enfadada ¿qué más da? si Edward Anthony Masen Cullen (y Robert, claro) no fuera tan guapo, alto, esbelto, maravilloso, apolíneo, la idealización del hombre perfecto en la tierra al fin y al cabo, y no tuviera sus propios abdominales, no se los podían haber pintado, porque hay que ser más exactos: no se los han pintado, ¡se los han “remarcado”! por eso de que los focos se comen muchas veces la realidad de las cosas, para que no nos perdamos detalles.
Así que, en vez de lamentarnos por esa tableta de chocolate con colorante, alegrémos nuestros ojos y disfrutemos de las cosas buenas que nos da la vida, en concreto de esta belleza inconmesurable.
Y mira que estos extras también han contado que Chris Weitz, el director, cuida muchísimo a Rob y se preocupa de que en las escenas difíciles, como el beso de ayer, no estén los extras, para que esté cómodo y con libertad para actuar… pues nada, se filtran los cotilleos.
Pero bueno, yo me alegro de eso, porque así tenemos para charlar otro rato, y si es de los abdominales de Rob, mejor que mejor.
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