Si hay algo que nos llama la atención de Juego de Tronos, eso es la escena que abre la serie, esa preciosa secuencia de títulos que nos traslada hasta el mágico mundo de Poniente, y que nos enseña cómo es el continente donde transcurre toda la acción que veremos en el episodio de la semana.
El vídeo que encuentras en la cabecera de este post nos cuenta, precisamente, como se imaginó y se confeccionó.
La compleja realización de esta entrada ha supuesto un duro trabajo para un buen número de profesionales del diseño y la animación.
Sólo su coste ha sido sensiblemente superior a lo que se podría gastar en la realización de un episodio de una serie estandard española, para que nos hagamos una idea.
La maqueta de la que surgen los distintos edificios que componen los diferentes reinos de Poniente es una pieza de relojería, como bien expresan los distintos elementos que la componen.
Una pequeña maravilla, hecha infográficamente, claro.
Pero antes de ver el resultado en pantalla, han tenido que trabajar esos diseñadores, dándole primero forma de dibujo, para pasarlo después a los encargados de crear cada una de las piezas que podemos ver, aunque sea de manera diminuta y breve en cada fotograma de la escena.
De ahí, a los animadores, que han encajado todos engranajes para que todo funcione de manera efectiva y parezca, realmente, un invento mecánico que funciona perfectamente.
La serie que adapta la novela de George RR Martin ha sido una de las más esperadas de esta temporada, y desde luego, no ha defraudado las expectativas que se tenían depositadas en ella.
La cadena HBO ya puede estar contenta, porque ha conseguido que algo más de 8,5 millones personas vieran el episodio piloto, y que en su tercer episodio hayan algo más de un 10 % más espectadores que en el segundo episodio, logrando unir a cada vez más espectadores a la aventura de Juego de Tronos.
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