Volvemos a hablar otra vez de Inma Cuesta, la actriz que arrasa por donde pisa, justo por eso, porque ahora mismo ella merece que contemos todo lo que sabemos de ella y que sigamos investigando.
Ahora la tenemos en Águila Roja, y aunque nosotros estemos disfrutando de su arte en la pantalla, ya ha terminado el rodaje.
Seguro que ahora se estará tomando las vacaciones que se merece.
Será porque al ser andaluza (o casi) como yo, la veo muy cercana, o no, será porque es cercana por sí misma.
Sólo hay que fijarse un poco en ella, en sus ojazos negros, en el aspecto de mujer española y andaluza, y su desparpajo cantando para saber que Inma vale, y que se lo ha ganado todo por méritos propios.
En la revista Man, de la que fue portada, declaró: Tengo pocos vicios: no fumo, no salgo mucho de copas… Cantando a diario, no me puedo permitir muchos excesos.
Si acaso, estar con mis amigos y el chocolate – Inma Cuesta Inma consigue lo que quiere, eso sí, con mucho tesón y esforzándose mucho, nadie le ha regalado nada.
Se vino cuando terminó su Licenciatura de Arte Dramático en la ESAD de Córdoba a Madrid, y no paró hasta hacerse un hueco.
Se veía venir, es lo que creen los que la conocen desde antes de ser famosa.
Ahora está muy contenta con las audiencias de Aguila Roja, y yo también, esperemos que siga así la cosa, y podamos verla a ella recoger algún día un Goya, como a Penélope Cruz, porque las cosas como son, Inma es, hasta más guapa que Penélope, y encima sabe cantar, no tendrían que haber hecho en playback en Volver.
Algunas fotos más para el disfrute de todos y todas.
Fotografías
