Es la continuación de la bronca que empezó ayer por la entrada de Carmen en Mujeres y Hombres y Viceversa, la que de nueva tiene poco porque Antonio no es su primer tronista, sino que es el tercero a por el que va.
Primero Manu, después Javi, y ahora Antonio.
No entiendo la manía de reciclar pretendientas.
De verdad.
Así que todo el mundo sigue enfadadísimo.
Rafa Mora sigue con la cantinela de que ella en realidad quería conquistarle a él, y que lo sabe todo el mundo, y ella lo niega.
Por cierto, la chica es bastante verdulera, no se corta un pelo, lo que Antonio define como que es una chica “con mucho carácter”.
Pues sí que tiene vista el torero.
Maribel sí que no se aguanta, ella que quiere tanto a Antonio, que piensa que tiene que ser a la que siempre haga caso, le pide a gritos que no la deje ahí, que esa mujer va a aprovecharse, hecha un berberisco.
Antonio no da crédito a que siga este lío.
Y no acaba, claro, Miriam sigue indignada porque cree que carmen estuvo con Pipi Estrada mientras él estaba con ella.
(Recordemos que ayer le dijo “Vienes disfrazada de señora pero eres la macarra del barrio”) y tiene la cara hasta el suelo.
Así que Antonio quiere saber que si todo lo que cuentan de ella es verdad, que por qué se la han llevado al programa, y Emma dice que eso lo dicen los colaboradores, pero que el programa trae chicas que puedan gustarle, según sus gustos y sus prototipos de chica.
Y se queda más conforme.
Así que decide que se queda, porque además de que es guapísima, le parece que la están tratando muy mal.
Yo no me creo nada, menos con esta, madre mía Antonio, que mala vista has tenido hijo mío.
Esperamos que por lo menos nos traiga distracciones en el programa.