Si antes lo avisamos antes pasa la desgracia.
Óscar Higares ha sido el último Superviviente en salir de la isla de Supervivientes 2010, y eso que mucha gente decía que no iba a seguir viendo el programa si lo echaban… aunque claro, con los cuatro gatos que lo ven, tampoco creo que eso sea muy doloroso.
Nominado con Trapote y Mireia Canalda y rompiendo todos los pronósticos, la sabia audiencia parece que decidió que él tenía que irse.
Y es que, justo ayer, Rafa Mora había iniciado su campaña de desprestigio contra él, cosa que tal vez tuvo algo que ver.
Rafa Mora cogió las gafas, la caña, se fue a pescar y volvió indignado diciendo que pescar era muy fácil y que le parecía fatal que Óscar no los hubiera dejado intentarlo antes, que seguro que lo hacía porque era muy fácil y no quería que le quitaran mérito.
Un poco alucinante, porque él lo único que hacía era estar todo el día tumbado sin dar palo al agua, no porque nadie lo obligara.
Lo mejor fue que no sólo Rafa se lo echó en cara en directo, sino que los demás se unían al momento reproches para echar las cosas en cara al expulsado… alucinante, de verdad.
Uno menos, una semana menos de concurso, un rival menos para Rafa Mora.
Pues mira, yo me alegro por él, que ayer habló su mujer en Ana Rosa, y es muy maja y dijo que sus niñas lo echan mucho de menos.
Él sí que tiene una vida que le espera ahí fuera.