El próximo otoño va a estar regido por los cuentos de hadas.
Entre la cadena ABC y la NBC ha surgido una competición para ver quien convence mejor a los espectadores con sendas series muy relacionadas entre sí.
Una es Once Upon a Time, y cuenta la llegada de una joven a un pueblo donde todos, incluso ella, son parte de las historias míticas.
En Grimm, la cadena NBC nos propone a un detective que puede ver a los monstruos de los cuentos tal y como son, despojándoles del disfraz humano que visten.
Y todo, porque es un descendiente de los hermanos Grimm, que en realidad transcribieron unas historias reales, y que ellos, presumiblemente, conocían de primera mano.
Con este argumento, asistimos al despertar a un mundo mágico y terrible del detective Bruckhart (David Giuntoli).
Su capacidad de ver más allá le permitirá resolver una serie de crímenes que no parecen tener explicación, a no ser que los causantes no sean humanos.
Junto a un hombre lobo redimido, interpretado por Silas Weir Mitchell (Me llamo Earl), van a descubrir al responsable de una serie de secuestros de jovenes, y su posterior asesinato.
En esta promo podemos ver cómo el villano del episodio captura a una de sus víctimas.
La promo, aunque nos enseña una escena que ya habíamos visto, juega con los títulos de los cuentos, y nos da a entender que, pese a todo, no son ficiticios, sino terriblemente reales.
Las sensaciones que me está dando esta serie son muy positivas, y estoy convencido de que, esta vez, la cadena acertará con el estreno.
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