Cayetano Rivera Ordoñez, el torero, y Eva González, la miss, están saliendo juntos y lo sabemos todos, aunque les pese.
Son los reyes de la discreción y muy recelosos de su vida privada, lo que es más que loable, pero les pillaron en Roma, ciudad que habían escogido para disfrutar de su incipiente enamoramiento en la más estricta intimidad, o eso pensaron.
Tan sumamente recelosos son que, se dice, no dijeron ni a sus amigos a dónde iban para que no pasaran cosas como las que han pasado: portada del ¡Hola!.
Y así andan ahora, investigando en su entorno con lupa y gabardina buscando pistas y preguntando a los amigos “¿quién ha sío?¿quién ha sío?” a la caza del traidor que hubiera desvelado el paradero de la pareja de famosos.
Claro que, si tenemos en cuenta que Roma es la capital de Italia, capital del Arte, ciudad que acoge El Vaticano y, al fin y al cabo, una de las más turísticas del mundo, que digo yo que pudiera ser, a lo mejor, quizás, que un turista español anduviera casual y accidentalmente por la misma ciudad o que, incluso, coincidieran en la misma calle y ante tal emoción de encontrarse con la pareja andante corriera veloz a plasmar una instantanea para enseñarla a sus amiguetes y, una vez en España, algún lumbreras le dijera: “oye, tía, llama al ¡Hola! que fijo que te dan una pasta!.
Pudiera ser.
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