Si alguien no se había enterado todavía de que Pink está embarazada, creo que estas fotos evidencian su estado de gestación.
Supongo que ya quedará poco para que sigamos viéndola lucir tripa por la calle, porque más que tripa, eso es un bombo a punto de decir basta en cualquier momento.
El hijito que está engendrando Pink en su vientre se nota que va a ser potente, al menos ya está convirtiendo en toda una cerdita madre a su progenitora.
Ella, más feliz que unas castañuelas, sigue disfrutando de lo poco que le queda de comer sin culpas antes de parir y de tener que darse cuenta que va a tener que empezar a ir evitando los antojos que hasta ahora tanto se concedía.
Y es que vale, Pink está embarazada, pero también se ha puesto bastante potola, porque de cara está casi irreconocible.
Lo cierto es que, sin querer ser mala, pero es que no puedo no decirlo, se está pareciendo bastante a la cerdita Peggy de los Teleñecos, ¿no creéis?A ella le da igual ya todo y está feliz con su tripota.
Así la lució con un veraniego vestido blanco que a poco más y se quedaba sin tela la costurera.
Look de dama blanca completado con unas estupendas gafas enormes y un sombrerito de paja que hacían más bucólico (y un tanto ridícula) aún la instantánea.
No está bien meterse con una embarazada, y yo no me estoy metiendo, tan solo describo y digo que Pink se ha tomado lo de concederse todos los caprichos en serio.
Esperemos que su hizo nazca sanote y con una dieta bajo el brazo en vez de pan, sino su mami va a tener que bailar mucho para volver a recuperar la figura…Pink embarazadísima: ya le queda poco para ser madreFotografía
