No es que Kiko Hernández se caracterice precisamente por saber estarse calladito, pero durante el programa de hoy de ‘Sálvame’ creo que no habrá guardado silencio ni dos minutos seguidos.
Primero con la polémica de las cerillas en Supervivientes, que él mismo desató al afirmar que el primer fuego en la isla se hizo gracias a las dos cerillas que Cuca había escondido en su Támpax antes de introducirlo en su vagina, cosa que fue confirmada por Olfo Bosé.
Pues la archienemiga de Kiko, Karmele Marchante nos ha dado más detalles.
Al parecer, todas las chicas de la edición de Supervivientes, mientras estaban en el hotel esperando que las trasladaran a la isla para comenzar la aventura, hicieron el pacto de introducirse todas un támpax con dos cerillas en el interior, aunque algunas fueron más listas y envolvieron previamente las cerillas en un plástico, asegurando los fósforos de la humedad propia del escondite.
Y entre estas listillas estuvo Cuca, por lo cual pudo usar una de sus cerillas para encender el primer fuego.
Y mientras explicaba esto Karmele, quizá deleitado por el hecho de que le diera la razón, Kiko escuchó atento, aunque le duró poco.
Enseguida empezó a meterse con Wilma, a tenor del peso perdido yle dijo a su madre: “Wilma se ha quedao hecha una mierda”, a lo que la madre de Wilma, apodada la “terremoto de Móstoles” por ése gato camuflado de peluca sintética que lleva en la cabeza, respondió sin cortarse: “Habló el adonis de la televisión”.
Y aún le han quedado energías para repartir insultos mordaces, entre los que le ha tocado pillar cacho a la novia de Matías, a la que ha bautizado como “la cornuda de España”.
Y justo cuando Jorge Javier se despedía porque se les acababa el tiempo, Kiko se ha quitado el jersey dejando al descubierto una camiseta con la reivindicación “Risto a OT” escrita.
Dios los cría y ellos se juntan, aunque reconozco que los insultos de Risto me parecen un poco más inteligentes.
Yo me uno a la causa: ¡¡¡RISTO A OT!!!Fotografía