La Confederació Empresarial de la Comunitat Valenciana presenta un estudio con propuestas de mejora tras la dana.

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La situación actual tras la dana en Valencia
La reciente dana que afectó a la Comunidad Valenciana ha dejado una huella profunda en la infraestructura y el bienestar de sus ciudadanos. La Confederació Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV) ha realizado un estudio exhaustivo que cifra en 12.503 millones de euros las inversiones urgentes necesarias para la recuperación del territorio.
Este informe no solo destaca la magnitud del daño, sino que también propone un conjunto de medidas para abordar la crisis de manera efectiva.
Propuestas de inversión y recuperación
El estudio de la CEV sugiere que se destinen 1.763 millones de euros a inversiones hidráulicas, un aspecto crítico que ha sido ignorado durante demasiado tiempo.
Además, se plantea la necesidad de invertir 2.093 millones en infraestructuras viarias y 7.292 millones en ferroviarias, incluyendo 890 millones para Metrovalencia. Estas inversiones son esenciales no solo para reparar los daños causados por la dana, sino también para preparar a la región para futuros eventos climáticos extremos.
La importancia de una estrategia metropolitana
El informe también subraya la necesidad de una estrategia metropolitana que involucre a las administraciones, sectores empresariales y ciudadanos. La CEV destaca que la Generalitat Valenciana debe jugar un papel crucial en la coordinación de estos esfuerzos, asegurando que las inversiones se realicen de manera eficiente y efectiva. La colaboración entre diferentes niveles de gobierno y la participación activa de la comunidad son fundamentales para superar los desafíos que presenta la recuperación.
Lecciones del pasado y visión de futuro
Vicent Esteban Chapapría, coordinador del informe, recordó que la respuesta a la riada de 1957 requirió un presupuesto significativamente mayor al inicialmente previsto. Esta experiencia histórica resalta la importancia de planificar con visión a largo plazo y de estar preparados para situaciones de emergencia. La CEV aboga por un enfoque proactivo que no solo contemple la reconstrucción, sino que también busque transformar la infraestructura de la región para hacerla más resiliente ante futuros desastres.