El incremento de demandas por daños climáticos refleja la urgencia de actuar contra el cambio climático.
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Un fenómeno en expansión
En los últimos años, el uso de tribunales y mecanismos legales para abordar el cambio climático ha experimentado un notable aumento. Según un informe de Zero Carbon Analytics, desde la firma del Acuerdo de París en 2015, se ha registrado un incremento del 7% en los casos presentados.
Este aumento no solo refleja la creciente preocupación por el medio ambiente, sino también la urgencia de la ciudadanía por exigir acciones concretas ante la inacción de los gobiernos y las empresas.
Casos emblemáticos y su impacto
Uno de los casos más destacados es el de Saúl Luciano Lliuya, un agricultor peruano que ha demandado a la empresa energética alemana RWE.
Su demanda se basa en la afirmación de que las emisiones de la compañía han contribuido al derretimiento de un glaciar cercano, lo que pone en riesgo a su comunidad. Este tipo de litigios no solo busca compensaciones económicas, sino que también pretende generar conciencia sobre la responsabilidad de las empresas en la crisis climática.
El papel de la ciudadanía y las organizaciones
La abogada Ana Barreira destaca que el aumento de estos casos se debe a que la ciudadanía está cada vez más consciente de la falta de medidas efectivas para frenar el cambio climático. Organizaciones como Ecologistas en Acción, Greenpeace y Fridays for Future han tomado la iniciativa de presentar demandas que cuestionan la inacción de los gobiernos. En España, el Tribunal Constitucional ha admitido a trámite el primer litigio climático del país, lo que marca un hito en la búsqueda de justicia ambiental.
Desafíos y perspectivas futuras
A pesar del aumento en el número de litigios, los expertos advierten que las sentencias pueden tardar mucho en llegar y, a menudo, no generan cambios significativos. Marcel Llavero, del Atlas de la Justicia Ambiental, expresa su escepticismo sobre la capacidad de los movimientos ecologistas para lograr victorias a largo plazo. Sin embargo, el aumento de la conciencia pública y la presión sobre las empresas y gobiernos podrían ser factores determinantes en la lucha contra el cambio climático.
Un mapa de conflictos ambientales
El Atlas de Justicia Ambiental del ICTA-UAB ha documentado más de 4,100 casos de conflictos ecológico-distributivos en todo el mundo. De estos, un 19% está relacionado con los combustibles fósiles y la generación de energía, otro 19% con la extracción minera, y un 13% con la agroindustria y la explotación de recursos naturales. Este mapa interactivo no solo proporciona datos sobre los conflictos existentes, sino que también sirve como herramienta para visibilizar las luchas de las comunidades afectadas.
