El Gobierno español destina 700 millones para fomentar el almacenamiento energético en empresas.
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El nuevo impulso a las inversiones energéticas
El Gobierno español ha anunciado una partida adicional de 700 millones de euros destinada a fomentar las inversiones en almacenamiento energético por parte de las empresas del sector. Esta medida, que se financiará a través de los fondos Feder de la Unión Europea, busca incentivar la integración del almacenamiento en el sistema energético nacional, un aspecto crucial para la transición ecológica y el reto demográfico que enfrenta el país.
La vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica, Sara Aagesen, destacó que estas ayudas, junto con el mecanismo de capacidad que se está preparando, serán un gran aliciente para que el almacenamiento energético avance con fuerza en esta década. En un receso de la reunión con el sector energético, Aagesen subrayó la importancia de estas inversiones para garantizar un suministro energético más sostenible y eficiente.
Planificación eléctrica y futuro de la energía nuclear
Durante la reunión, también se abordó el progreso en la planificación eléctrica para los próximos años, un trabajo que está llevando a cabo la Comisión Nacional de Mercados y Competencia. Se espera que esta planificación esté lista en las próximas semanas para ser presentada a audiencia pública. Aunque Aagesen no reveló detalles específicos sobre el contenido de la planificación, sí mencionó que se incrementará el límite actual para la inversión en la ampliación y adecuación de redes eléctricas.
En cuanto al futuro de la energía nuclear en España, Aagesen reiteró su disposición al diálogo con las empresas del sector. Sin embargo, enfatizó que hasta el momento no se ha discutido la modificación del calendario de cierre de las plantas nucleares existentes. La ministra destacó que los principales puntos de negociación se centran en los retos establecidos en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima, que busca un equilibrio entre la sostenibilidad y la seguridad del suministro energético.
Impacto de la política comercial de Estados Unidos
Aagesen también se refirió al impacto de la nueva política comercial de Estados Unidos, que se ha consolidado como el principal suministrador de gas de Europa. La ministra descartó que la dependencia de Europa de Rusia antes de la guerra de Ucrania sea comparable con la situación actual, señalando que la procedencia del gas se ha diversificado significativamente.
La ministra enfatizó la necesidad de que Europa desarrolle un plan que permita reducir la dependencia de Rusia, garantizando al mismo tiempo la estabilidad del suministro energético. Aagesen subrayó que la autonomía estratégica se logrará mediante un mayor uso de energías renovables y un transporte más autóctono en el futuro, lo que permitirá a Europa avanzar hacia un modelo energético más sostenible y menos vulnerable a crisis externas.
