La sequía en Catalunya impulsa la modernización de los sistemas de riego para garantizar la producción agrícola.
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La crisis del agua en Catalunya
La sequía prolongada que ha afectado a Catalunya en los últimos años ha puesto de manifiesto la urgente necesidad de modernizar los sistemas de riego en la región. Con embalses como el de Guiamets al 10% de su capacidad, la situación se torna crítica para los agricultores que dependen del agua para sus cultivos.
Este escenario ha llevado a las autoridades a movilizar recursos significativos para mitigar el impacto de la falta de agua en la producción agrícola, especialmente en productos emblemáticos como el aceite de oliva y el cava, cuyos precios han aumentado considerablemente.
Iniciativas gubernamentales y financiamiento
El gobierno catalán ha respondido a esta crisis con un plan de ayudas que ha inyectado 67 millones de euros en apoyo a los agricultores afectados. Sin embargo, estas ayudas son consideradas solo soluciones temporales. Òscar Ordeig, titular de Agricultura, ha enfatizado la necesidad de un sistema de riego más eficiente que permita afrontar futuros episodios de sequía y optimizar el uso del agua. En este contexto, se está elaborando un nuevo plan de modernización de riegos que abarcará el periodo 2025-2040, con una inversión estimada de 1.000 millones de euros.
Proyectos de modernización en marcha
Entre las acciones más inmediatas se encuentra la modernización del riego en el canal de Urgell y el delta del Llobregat, así como la actualización de los sistemas de riego en los ríos Ter y Muga. Estas iniciativas buscan adaptar la infraestructura existente a las exigencias de la emergencia climática y asegurar la producción alimentaria. Un ejemplo concreto de estas acciones es el embalse de Guiamets, donde se han iniciado obras de reforma que permitirán garantizar el suministro de agua para riego en la comarca del Priorat. Este proyecto, con un coste de 5,7 millones de euros, es fundamental para asegurar la viabilidad de 1.400 hectáreas de cultivos que han sufrido sequías severas en las últimas campañas.
El futuro del sistema agroalimentario
La modernización del sistema de riego no solo es crucial para enfrentar la sequía, sino que también está alineada con la estrategia alimentaria que el departamento de Agricultura está desarrollando hasta 2028. Esta estrategia incluye la creación de un nuevo marco normativo para la sostenibilidad del sistema alimentario, el impulso de infraestructuras alimentarias compartidas y la transformación digital del sector. Con estas medidas, Catalunya busca no solo adaptarse a la escasez de agua, sino también garantizar un futuro sostenible para su producción agrícola.
