El aumento de la riqueza neta y la accesibilidad a la vivienda en España
Temas cubiertos
Un panorama optimista para las familias
El último informe del Banco de España presenta un escenario alentador para las familias españolas, destacando un notable incremento en su riqueza neta. A finales de 2024, se estima que la riqueza neta de los hogares ha aumentado en más de 150.000 millones de euros, con casi 100.000 millones atribuibles a la revalorización de activos inmobiliarios.
Este crecimiento se debe principalmente al aumento en los precios de la vivienda, que ha permitido a muchas familias ver un incremento significativo en su patrimonio.
La vivienda como motor de riqueza
La vivienda se ha convertido en un pilar fundamental de la riqueza familiar en España.
Según el informe, las familias españolas poseen una mayor proporción de su riqueza en activos inmobiliarios en comparación con el promedio de la zona euro. Sin embargo, a pesar de este aumento en la riqueza, el informe también señala que la accesibilidad a la vivienda sigue siendo un desafío. Aunque los precios han subido, el dinamismo de la renta per cápita y la disminución de los costes de financiación han ayudado a mitigar el impacto negativo de estos aumentos en la capacidad de compra de las familias.
El impacto de las hipotecas en la economía familiar
El informe también revela cambios significativos en el mercado hipotecario. En el segundo semestre de 2024, el 62% de las nuevas hipotecas se firmaron a tipo fijo, un aumento notable respecto al 44% del año anterior. Esta tendencia refleja un regreso a la preferencia por hipotecas más estables en un entorno de tipos de interés en descenso. Además, el crédito para la adquisición de vivienda ha crecido un 0,9% interanual, lo que indica una mayor disposición de las entidades financieras a otorgar préstamos en un contexto de mejora económica.
Desafíos y oportunidades en el crédito al consumo
A pesar de la mejora en la situación financiera de los hogares, el informe también destaca un aumento del 20% en el crédito al consumo en el segundo semestre de 2024. Este crecimiento se ha observado en todos los niveles de ingresos, pero es especialmente notable entre las rentas más bajas. A pesar de este aumento en el crédito, la tasa de préstamos dudosos se ha mantenido relativamente baja, lo que sugiere que las familias están manejando sus deudas de manera más efectiva. La creación de empleo y las mejoras salariales han sido factores clave en este contexto, permitiendo a las familias mejorar su situación financiera y aumentar su tasa de ahorro.