La compañía francesa busca rentabilidad tras su expansión en España y enfrenta desafíos.
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La llegada de Ouigo a Andalucía
El pasado martes, Ouigo, la compañía ferroviaria de bajo coste, inauguró su nueva conexión que une Madrid con Andalucía, pasando por ciudades clave como Córdoba, Sevilla y Málaga. Este evento marca un hito en la liberalización del transporte ferroviario en España, siendo este el segundo corredor más rentable del país.
Alain Krakovitch, consejero delegado de Ouigo España, expresó su optimismo al afirmar que con esta nueva ruta, la empresa está más cerca de alcanzar la rentabilidad esperada.
Expectativas financieras y crecimiento
Hélène Valenzuela, la consejera delegada de Ouigo en España, también mostró un enfoque positivo sobre el futuro financiero de la compañía.
Según sus declaraciones, se espera que el EBITDA (resultado operativo) crezca un 50% en 2024, a pesar de que en 2023 la empresa registró pérdidas de 19 millones de euros. Desde su entrada en el mercado español en 2021, Ouigo ha enfrentado un aumento constante en sus pérdidas, alcanzando los 42,7 millones de euros en 2023, a pesar de un crecimiento del 30,8% en su facturación.
Desafíos en el camino hacia la rentabilidad
A pesar de las expectativas optimistas, Ouigo ha enfrentado varios desafíos que han dificultado su camino hacia la rentabilidad. El retraso en la apertura de la conexión a Andalucía y el impacto de eventos climáticos en otras rutas han afectado su desempeño. Además, el ministro de Transportes, Óscar Puente, ha acusado a Ouigo de realizar prácticas de dumping, vendiendo billetes por debajo de su costo para atraer pasajeros, lo que ha generado tensiones con su principal competidor, Renfe.
La guerra de precios y el futuro de Ouigo
Con la llegada de Ouigo a Andalucía, la compañía ha dejado claro que continuará su estrategia de precios bajos, ofreciendo billetes a precios muy competitivos. Esto ha generado preocupación en el sector ferroviario, especialmente para Renfe, que ha visto cómo sus propias finanzas se ven afectadas por la competencia. Krakovitch ha defendido la estrategia de Ouigo, argumentando que la empresa opera bajo criterios de rentabilidad y nunca ha recibido ayudas estatales, lo que la diferencia de otros operadores.
Compromiso a largo plazo
A pesar de los desafíos y las críticas, Ouigo reafirma su compromiso con el mercado español. La compañía ha indicado que su expansión dependerá de la regulación futura y de los nuevos cánones ferroviarios que se establezcan. Con la apertura de esta nueva ruta, Ouigo busca no solo aumentar su número de pasajeros, sino también consolidar su presencia en el competitivo mercado ferroviario español.
