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Miles de personas marchan en defensa de la central nuclear de Almaraz

La comunidad extremeña se une para exigir la permanencia de la central nuclear ante su cierre inminente.

Persone in marcia per sostenere la centrale nucleare di Almaraz
Una folla di manifestanti si riunisce per difendere la centrale nucleare di Almaraz.

Una manifestación masiva en Almaraz

Este fin de semana, miles de personas se han congregado en la plaza del Ayuntamiento de Almaraz para marchar hacia las puertas de la central nuclear, ubicada en Navalmoral de la Mata, Cáceres.

La manifestación, que comenzó a las horas, fue convocada por los ayuntamientos de la zona y la plataforma ciudadana ‘Sí a Almaraz, Sí al futuro’. El objetivo principal de esta movilización es visibilizar el rechazo de una gran parte de la sociedad extremeña al cierre de la planta nuclear, programado para iniciar en 2027 y finalizar en 2028.

Apoyo político y social

La marcha ha contado con la presencia de numerosos representantes políticos de diferentes partidos, lo que demuestra la importancia del tema en la agenda pública. Entre los asistentes se encontraba la presidenta de la Junta de Extremadura, María Guardiola, quien encabezó la comitiva junto al alcalde de Navalmoral de la Mata, Enrique Hueso Retamosa, y el divulgador científico Alfredo García, reconocido por su labor en el sector nuclear. La participación de estos líderes políticos resalta la relevancia del asunto y la necesidad de un debate abierto sobre el futuro de la energía nuclear en la región.

Impacto en la comunidad y la economía

El cierre de la central nuclear de Almaraz no solo afectaría a los trabajadores de la planta, sino que también tendría repercusiones significativas en la economía local. La central ha sido un pilar fundamental en la generación de empleo y en el desarrollo económico de la región. Durante la manifestación, se escucharon voces de alcaldes, ciudadanos y representantes de sectores económicos que expresaron su preocupación por las consecuencias que tendría el cierre de la instalación. La movilización ha sido un claro indicativo de que la comunidad está unida en su deseo de mantener la planta operativa y asegurar un futuro energético sostenible para Extremadura.

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