Descubre las horas más baratas para usar la electricidad y ahorra en tu factura mensual.
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Entendiendo el precio de la electricidad
El costo de la electricidad varía a lo largo del día, lo que significa que los consumidores deben estar atentos a las horas más económicas para utilizar sus electrodomésticos. Según datos recientes del operador OMIE, la referencia media del precio mayorista de la electricidad se sitúa en 136,45 euros por megavatio hora (MWh).
Sin embargo, este precio no es constante y presenta grandes diferencias según la hora del día.
Las horas más caras y más baratas
Para optimizar el consumo y ahorrar en la factura, es crucial conocer cuáles son las horas más baratas y más caras.
Por ejemplo, la hora más cara se registrará entre las y las , alcanzando un precio de 0,27651 euros por kilovatio hora (kWh). En contraste, la hora más barata se dará entre las y las , donde el coste será de 0,15565 euros por kWh. Esta información permite a los consumidores planificar el uso de sus electrodomésticos, como la lavadora o el horno, en los momentos más económicos.
Factores que influyen en el precio de la luz
El precio de la electricidad está influenciado por varios factores, siendo la demanda uno de los más significativos. Durante los picos de frío o calor, la demanda de energía aumenta, lo que provoca un incremento en los precios. Además, otros conceptos como los servicios de ajuste, los peajes y los cargos también pueden variar el costo de la luz. Por lo tanto, es fundamental estar informado sobre estos aspectos para poder gestionar mejor el consumo eléctrico.
Consejos prácticos para reducir el gasto energético
Para reducir la factura de la luz, se recomienda establecer un horario para el uso de electrodomésticos que coincida con las horas más baratas. Además, es aconsejable utilizar electrodomésticos eficientes y mantener un buen aislamiento en el hogar para minimizar el consumo energético. También se puede considerar la instalación de sistemas de energía renovable, como paneles solares, que pueden ayudar a reducir la dependencia de la red eléctrica y, por ende, los costos asociados.