José Luis Escrivá detalla los retos y objetivos del nuevo plan del banco central.
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Un nuevo rumbo para el Banco de España
El Banco de España se encuentra en la fase final de elaboración de un ambicioso plan estratégico que abarcará desde 20. Este plan, que será presentado oficialmente el próximo año, tiene como objetivo principal la transformación digital de la institución.
Durante su primera comparecencia ante el Congreso, el gobernador José Luis Escrivá destacó la importancia de adaptarse a los nuevos desafíos que plantea el entorno financiero actual, incluyendo los criptoactivos y la banca en la sombra.
Enfoque en la contratación de talento tecnológico
Uno de los aspectos más relevantes del nuevo plan es el enfoque en la contratación de personal con perfiles tecnológicos. Escrivá subrayó que el Banco de España enfrenta una escasez de personal en comparación con otros bancos centrales del Eurosistema. Con solo 3.473 empleados, la institución se queda corta en recursos humanos en comparación con el Banco de Italia, que cuenta con 6.968, y el Bundesbank, que tiene 10.255. Esta situación ha llevado a Escrivá a afirmar que la dotación de personal es “muy justa” y que sus “excelentes empleados” a menudo se sienten “estresados” debido a la carga de trabajo.
Mejoras en la estructura organizativa y transparencia
El plan estratégico se fundamenta en tres pilares: talento, tecnología y transformación organizativa. Además, se enfatiza la necesidad de aumentar la transparencia, un aspecto que Escrivá considera crucial para el futuro del banco. “El banco ha mirado mucho hacia dentro y ahora tiene que mirar hacia fuera”, afirmó. Esto implica no solo una mejora en la gestión interna, sino también un acercamiento a la ciudadanía y a las empresas, especialmente en ciudades clave como Barcelona, Valencia y Sevilla, donde se potenciarán las sucursales.
Desafíos y oportunidades en el horizonte
El nuevo plan también contempla la reducción de la tasa de temporalidad, actualmente en un 14%, y la implementación de procesos de selección de personal más regulares y predecibles. Escrivá enfatizó que el Banco de España, que representa el 12% del capital del BCE, solo dispone del 5% de los recursos tecnológicos del Bundesbank, lo que pone de manifiesto la necesidad de una inversión significativa en tecnología para fomentar la innovación y el uso de datos.
En resumen, el Banco de España se prepara para un futuro que exige adaptabilidad y modernización. Con un enfoque claro en la transformación digital y el refuerzo del talento humano, la institución busca no solo mejorar su eficiencia interna, sino también su relevancia en el contexto europeo y global.
