Un ataque potencial de Israel a los yacimientos de petróleo en Irán podría provocar un aumento en los precios del crudo, aunque los principales países productores, como Arabia Saudita, estarían en condiciones de compensar la falta de suministro a nivel global.
Hay señales de que varios productores de petróleo están manteniendo buques en el mar, alejados de las zonas de conflicto. La oferta pública de adquisición de BBVA sobre Banc Sabadell parece haber avanzado hacia valorizaciones que podrían mejorar si se ofrecen dividendos más altos.
Los resultados de Garanti Bank, ubicado en Turquía y donde BBVA posee una considerable participación, aún no son claros. Además, la fluctuación de la moneda turca representa otro aspecto importante. Durante el mandato del presidente Erdogan, Turquía controló el tránsito marítimo por el Bósforo, especialmente cuando los principales productores de cereales, como Rusia y Ucrania, usaban el mar Negro para suministrar a Europa y África. Al mismo tiempo, el transporte de petróleo y gas natural también fue crucial. Finalmente, Erdogan actuó como un mediador clave para Ucrania en la búsqueda de una resolución al conflicto. Su influencia fue igualmente significativa cuando Suecia aspiraba a ser miembro pleno de la OTAN; debido a motivos no sencillos, Suecia permaneció por años en un estado de espera bajo la mediación de Erdogan. Actualmente, su rol como intermediario ha sido gratificado, ya que Rusia ha contribuido a asegurar que Turquía cuente con suficiente energía mediante la implementación de centrales nucleares de última generación bajo condiciones muy favorables.