Los habitantes del País Vasco cuentan con el doble de posibilidades de alcanzar el éxito económico en comparación con los residentes de Extremadura. Esta afirmación proviene de un estudio realizado por la Fundación Ramón Areces y el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (Ivie), que se centra en la renta familiar, los indicadores de pobreza y desigualdad.
El objetivo del análisis es determinar “la probabilidad de que los habitantes de una área geográfica logren mejores ingresos que aquellos de otros lugares”. Las áreas más adineradas incluyen las comunidades forales, Madrid y Cataluña, mientras que las menos favorecidas son Andalucía, Canarias, Extremadura, Castilla-La Mancha, la Región de Murcia y la Comunitat Valenciana, según el informe “Distribución geográfica de la renta de los hogares en España” elaborado por los mencionados organismos.
Se señala que “las regiones y provincias con mayores ingresos no siempre presentan los mejores índices de desigualdad y pobreza”. Por otro lado, las áreas con bajo potencial de desarrollo son “más desiguales y enfrentan un mayor porcentaje de pobreza”. El estudio también indica que una economía dependiente del turismo puede ser perjudicial para el bienestar, ya que a menudo se observa “bajo nivel de calidad de vida, lo que sugiere que los beneficios de esta actividad no benefician a los residentes”. Además, se resalta que la pobreza extrema ha bajado en España, alcanzando en 2021 un 8,8% de la población viviendo con ingresos por debajo del 40% de la renta media nacional, en comparación con el 12,1% registrado en 2015.