Netflix continúa siendo un líder indiscutible en el ámbito del streaming. A pesar de haber incrementado tarifas, implementado anuncios y limitado el uso compartido de contraseñas, la plataforma estadounidense se ha mantenido firme en su posición. Hace dos años, cuando comunicó estas medidas poco populares, muchos en el mercado se mostraban escépticos y temían una posible pérdida de suscriptores ante la avalancha de críticas.
Sin embargo, dos años después, sus acciones han alcanzado niveles récord, superando los 730 dólares cada una. Los resultados financieros son impresionantes, con un crecimiento del 20% en beneficios en 2023, alcanzando 5.408 millones de dólares, y un aumento de ingresos del 7%, llegando a 31.000 millones de dólares.
Su base de usuarios también ha crecido, superando los 277,6 millones, lo que la coloca por delante de los 200 millones de Amazon Prime, su principal competidor en el mercado estadounidense. Cabe resaltar que un 45% de nuevos suscriptores optan por la versión con anuncios. Este éxito se produce en un contexto de cambios en la dirección, con Reed Hastings, el fundador de la empresa en 1997, dejando el cargo de CEO el año anterior y siendo reemplazado por Greg Peters y Ted Sarandos. Según el consultor Enrique San Juan, la clave del mantenimiento del liderazgo de Netflix radica en haber sido pionero en la popularización de servicios de streaming.
En este contexto, se menciona que ha logrado evaluar acertadamente el efecto de sus decisiones, las cuales han sido “medidas evidentes”, lo que significa que los usuarios no dudan al renovar su suscripción, ya que optar por servicios ilegales o plataformas con contenido alternativo no les resulta atractivo. De hecho, Netflix afirma que casi el 50% de las nuevas cuentas se originan a partir de su modelo de suscripción con anuncios. A su vez, San Juan opina que Netflix ha manejado de manera efectiva el elemento de la conexión emocional. La plataforma produce contenido audiovisual en diferentes regiones, incluyendo España, donde, curiosamente, Amazon Prime ha superado a Netflix por un estrecho margen en el tercer trimestre de este año. Ante la efectividad de este nuevo enfoque como una forma de generar ingresos, los rivales han comenzado a imitarlo en gran medida. Amazon Prime, Max (anteriormente HBO) y Disney+ ya han implementado modelos de suscripción con publicidad y también han comenzado a crear películas y series fuera de los Estados Unidos. “Netflix siempre innova con estrategias que rompen esquemas, algo que en Filmin hemos presenciado en diversas ocasiones. Ya no nos sorprende nada. La plataforma también eliminó la costumbre de lanzar un capítulo semanal, permitiendo que los usuarios vean toda la serie de una vez. Incluso ha incorporado la opción de aumentar la velocidad de reproducción”, señala Juan Carlos Tous, cofundador de Filmin, una plataforma de streaming originaria de Barcelona que tampoco descarta la posibilidad de introducir anuncios, pero solo antes del inicio de las películas. El próximo objetivo del gigante estadounidense es la transmisión en vivo de eventos deportivos y la oferta de videojuegos. Ahora, Netflix está explorando nuevas direcciones en su modelo de negocio. Con su liderazgo en series y películas, busca diversificarse, incorporando videojuegos (ya disponibles) y principalmente, la transmisión en directo de grandes eventos deportivos y shows. Cabe señalar que esta última idea no es original de Netflix, sino que proviene de Amazon Prime.
Amazon, el coloso del comercio electrónico, está haciendo grandes esfuerzos para adelantarse a la competencia al ofrecer transmisiones de la Premier League de fútbol y la NBA, tras haber firmado un nuevo contrato de emisión. Desde Filmin, Tous se cuestiona si la decisión de Amazon y Netflix de centrarse en contenido en vivo podría llevar al sector a transformarse en una versión moderna de la televisión tradicional, aunque bajo un modelo de suscripción y con publicidad. No obstante, es prematuro llegar a una conclusión definitiva al respecto.
