Esta mañana, el presidente de Foment del Treball, Josep Sánchez Llibre, expresó su total apoyo a la sugerencia de la ministra Elma Saiz sobre la flexibilización de la incapacidad laboral. Ha enfatizado que esta idea ha sido objeto de discusión en anteriores encuentros tanto de Foment como de la CEOE, y la consideran acertada para mitigar el elevado absentismo laboral presente en España.
Sánchez Llibre destacó que este desafío afecta a todas las empresas, pero tiene un impacto particular en las pequeñas y medianas empresas.
Desde su perspectiva, permitir la combinación del tratamiento de ciertas enfermedades con la actividad laboral mediante una incapacidad laboral parcial sería algo muy positivo.
Para él, esto beneficiaría especialmente a quienes tienen múltiples trabajos, ya que les permitiría continuar con su tratamiento a la vez que trabajan en alguna de sus ocupaciones. Sin embargo, subrayó que es crucial que esta idea sea debatida en el Consejo de Diálogo Social y alcanzada en consenso con los sindicatos. “Es una propuesta muy lógica, espero que se logren acuerdos en el diáfano social”, agregó.
En relación con este tema, Sánchez Llibre mencionó un estudio que fue presentado en julio por la patronal sobre la influencia del absentismo. Este informe revela que el absentismo representa un coste de 37.000 millones de euros para las empresas en España, lo que se traduce en un 3,1% del producto interno bruto. La tasa media de absentismo en el país es del 7,2%, aunque ha llegado a alcanzar picos entre el 20% y el 30% en diversas ocasiones.
