Marie Kondo es una especialista en organización del hogar de origen japonés, conocida por sus reglas para ordenar tus cosas con eficacia y, más importantes, para entender cuándo es hora de desprenderse de ellas. Según Kondo, la evaluación de tus sentimientos hacia los objetos que posees, darte cuenta de cuáles han cumplido su propósito, agradecerles y despedirte de ellos es en realidad un análisis profundo de ti mismo, una transición hacia una nueva etapa de tu vida.
Podría ser que una casa en el pueblo o un apartamento heredado en otra zona de la ciudad estén entorpeciendo tu progreso hacia nuevos objetivos. Vamos a considerar y aplicar algunos de sus consejos en el contexto de bienes inmuebles.
Mantén las cosas que amas (no simplemente “porque sí”). Kondo se refiere a objetos que almacenamos en nuestra casa sin un motivo claro y que no cumplen ninguna función específica. Los conservamos “por si acaso”. Eso mismo puede ser aplicado a nuestras propiedades. Si posees un inmueble que no aporta nada significativo a tu vida, posiblemente sea un obstáculo para tu felicidad. Decide si es el momento de soltarlo: «Como solo mantendrás las cosas que amas, tu energía y alegría se incrementarán», dice Kondo.
Para determinar si esto es lo que ocurre en tu caso, fórmula preguntas como: ¿Esto me hace feliz? ¿Me alegraría mantenerlo en mi vida? «Si la respuesta es sí, consérvalo. Si no, elimínalo», aconseja Kondo de manera firme.
Reconoce la diferencia entre «amar» y el valor emocional. Los expertos en bienes inmuebles entienden que algunos dueños sienten un apego emocional que influye en el precio de venta del inmueble. Es importante saber distinguir entre el valor real de la propiedad y el que pensamos que tiene debido a este apego. Para determinar el precio real, puedes hacer uso de una herramienta de tasación de inmuebles como la que ofrece Housfy.
Marie Kondo sostiene que «todos tus bienes anhelan ser de utilidad». Si la propiedad de la que eres dueño ya no te beneficia, o no tanto como pensabas, es tiempo de liberarla.
Por un lado, la venta de tu propiedad te dará la chance de obtener otros activos o vivir experiencias desconocidas que tal vez no habías considerado.
Por otro lado, permitirás que esa casa sea beneficiosa para alguien que realmente la necesite y la desee. Finalmente, “todo lo que posees quiere ser útil para ti”, dice Kondo. Si no lo es para ti, debes permitir que sea útil para otra persona.
Transforma el adiós en una ceremonia.
Marie Kondo es célebre por su método de despedirse de tus pertenencias como una ceremonia «para enviarlas a un nuevo periplo». Decir adiós es festejar. No lamentes, persuade Kondo, más bien muestra agradecimiento por el hogar que estás soltando.
Viste de manera apropiada para la ocasión. “Cuando demuestro respeto a través de la ropa que decido usar y comienzo el trabajo […] saludando a la casa, ésta se sentirá complacida”, asegura la profesional japonesa.
Agradece las ventajas que te ha brindado la vivienda y reconoce su función. Una forma de hacerlo es mediante el sentido de la visión y el tacto: recorre la casa y toca cada rincón, mientras en tu mente agradeces el tiempo que ha estado en tus manos.