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El gobierno ha dado luz verde a la misma trayectoria de déficit que Junts rechazó, sin brindar una mayor flexibilidad a las comunidades autónomas

Este martes, el Gobierno ratificó la trayectoria del déficit para el período 2025-2027, manteniendo los mismos objetivos propuestos en julio, que fueron rechazados en el Congreso de los Diputados. Junts votó junto a PP y Vox, infligiendo así un revés significativo al Gobierno.

Esta es la segunda ocasión en la que el Consejo de Ministros aprueba las cifras macroeconómicas que deberían respaldar el presupuesto estatal y de las comunidades autónomas para el próximo año. No obstante, estas cifras corren el riesgo de ser nuevamente rechazadas en la Cámara Baja, lo cual significaría que los gobiernos autónomos tendrían 11.550 millones menos para los próximos dos años, advierte el Ministerio de Hacienda.

El camino de estabilidad aprobado hoy prevé para 2025, 2026 y 2027 un requerimiento de déficit del 0,1% del PIB para las comunidades autónomas y un balance presupuestario para las entidades locales. Estas cifras son mejores que las previstas para 2024 en el Plan de Estabilidad enviado a Bruselas, como señaló la vicepresidenta y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, pero también son las mismas que las votadas en contra en el Parlamento a finales de julio. Recordemos que España debe cumplir con las normas fiscales de la UE, que establecen un déficit para todas las administraciones del 2,5% para 2025, del 2,1% para 2026 y del 1,8% para 2027.

Junts solicitó al gobierno una rectificación del camino anterior para permitir que las regiones autónomas tuvieran una mayor flexibilidad fiscal a expensas del Estado. Dijeron fuentes del partido catalán, «Tomaremos en cuenta si se suaviza el camino del déficit,» añadiendo que negociarían «elemento por elemento» con el PSOE. La decisión de Junts fue controvertida internamente. En enero de este año, el partido liderado por Carles Puigdemont validó dos veces los objetivos de déficit del Ministerio de Hacienda, lo que permitió la presentación de los presupuestos generales de 2024. Sin embargo, los presupuestos no fueron aprobados debido a la convocatoria de elecciones en Cataluña.

María Jesús Montero no mencionó hoy a Junts, cuyos votos serían necesarios para aprobar esta propuesta, sino que dirigió su atención al PP en busca de su supuesto apoyo en la votación. La vicepresidenta del gobierno aseguró que si el principal partido de la oposición se negara a apoyar estos objetivos presupuestarios, las regiones autónomas tendrían un margen adicional de 11.550 millones de euros durante 2025 y 2026. La vicepresidenta instó a los miembros del PP a que «establezcan un mínimo de sensatez para que los presidentes regionales y los alcaldes» tengan un mayor margen fiscal.

«El camino que estamos tomando permitirá que las comunidades autónomas y los gobiernos locales no tengan que trabajar en la reducción del déficit y la consolidación fiscal en los años futuros», ha argumentado Montero. «Todos los nuevos ingresos se podrían destinar a financiar las políticas públicas», ha añadido. La primera vicepresidenta señaló que «es complicado mejorar» la ruta presentada hoy en su segunda etapa y cuestionó las intenciones del PP. «¿Esperan empeorar?», indagó. «Si yo fuera líder o alcalde del PP, pediría explicaciones a mi partido por oponerse sin motivo», declaró.

En cuanto a la posibilidad de que el Congreso rechace nuevamente la ruta de estabilidad por segunda vez, la Vicepresidenta Montero confirmó que el plan del Gobierno incluye la aprobación del Presupuesto General para 2025, pero basado en la anterior ruta de déficit.

El gobierno también ha optado por reafirmar el límite de gasto que se aprobó en julio, lo cual no necesita validación del parlamento, ya que es responsabilidad del Ejecutivo. De esta manera, el límite de gasto no financiero para 2025 es de 199.171 millones, incluyendo los fondos europeos, una cifra ligeramente mayor a los 199.120 millones establecidos como límite para este año. Sin incluir el extra del Plan de Recuperación, el límite se redujo a 195.353 millones. Según las proyecciones del Ministerio de Hacienda, la recaudación fiscal aumentará un 6,5% el próximo año. No hay cambios en este aspecto en comparación con el anuncio de julio.

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