El Banco de España informó el lunes que la deuda pública de la nación aumentó en junio en aproximadamente 25.000 millones de euros, interrumpiendo una disminución de dos meses y alcanzando un nuevo récord de 1,625 billones de euros.
En comparación con el año pasado, el total creció un 3,6% y representó el 108,2% del PIB al final del segundo trimestre, ligeramente por debajo del 109% del trimestre anterior, gracias al impulso económico.
El Estado posee la mayor parte de la deuda, con 1,468 billones de euros después de un aumento interanual del 5,1%.
Solo en junio aumentó en 24.000 millones, lo que explicó la mayor parte del impacto total. Albert Guivernau, profesor de OBS Business School, señala que estas cifras no son positivas a pesar de un récord en los ingresos por el impuesto sobre la renta de 122.000 millones de euros, un 30% más que hace tres años, y un récord en la recaudación del IVA de 88.000 millones de euros. A pesar de estos ingresos fiscales y las contribuciones sociales, las finanzas públicas no están tan saludables como se podría esperar.
La deuda de otras partes del gobierno central, como FROB o Sareb, suma 39.000 millones de euros. También es significativo el aumento del 9,4% interanual de la deuda de la Seguridad Social, más del doble del crecimiento de la deuda pública total, con un aumento de 10.000 millones en el último año.
Las deudas de las comunidades autónomas han experimentado un aumento del 3,2%, llegando a un total de 338.000 millones de euros, después de recibir un impulso de 4.978 millones de euros en un mes. No obstante, el sector de las corporaciones locales destaca al romper esta tendencia, con una suma total de deuda de 24.000 millones de euros, y una disminución del 0,7% si se miran las cifras del año pasado. Aunque, comparado con mayo, cabeza un aumento de 120 millones.
La mayoría de la deuda se encuentra a largo plazo
Antes del brote de la pandemia la deuda estaba por debajo del 100% del PIB. Durante el 2020, debido a la implementación de programas de apoyo económico para mitigar la crisis de la pandemia y la caída de la actividad, esta se disparó hasta llegar a un pico del 125% en el primer trimestre del 2021. A partir de ahí, gracias a la recuperación del PIB, ha habido una disminución gradual, aunque los números aún superan el 100%.
La deuda acumulada es principalmente a largo plazo, alcanzando 1,37 billones de euros, después de un aumento de 22.000 millones en junio. Los valores de deuda a corto plazo han visto una pequeña disminución en comparación con mayo, con 60 millones de euros menos.
La reintroducción de reglas fiscales a nivel comunitario ha sido aprobada este año, con límites del 60% del PIB para la deuda y del 3% para el déficit, después de haber estado en pausa durante cuatro años. En abril, la Comisión Europea inició procedimientos contra varios países miembros, aunque decidió no incluir a España en este grupo. Guivernau cree, “sin duda, en las próximas recomendaciones semestrales de la Comisión Europea previstas para octubre, dará un aviso a la economía española para hacer ajustes y endurecerá las reglas fiscales”.
