El crecimiento significativo de la inflación que inició a finales de 2021 y continuó a través de 2022 y gran parte de 2023, disminuyó el poder de compra de los ciudadanos. Esta escalada fue una repercusión de los obstáculos surgidos en la reactivación económica posterior a la pandemia y se vio exacerbada por la elevación de los costos energéticos tras la invasión rusa a Ucrania.
Aunque el aumento del Índice de Precios al Consumo (IPC) fue contrarrestado por incrementos salariales, al final del año pasado, el poder adquisitivo de los trabajadores todavía no había recuperado su nivel completo. Varios informes y datos divulgados recientemente sugieren que este objetivo podría alcanzarse durante este año.
El documento más reciente que respalda esta idea es la nota de coyuntura económica publicada en agosto por el Departament d’Economia de la Generalitat. En ella se sostiene que los registros de costes salariales e inflación del primer trimestre respaldan una completa recuperación del poder de compra en la comunidad autónoma, un proceso que comenzó el año pasado. En relación con el panorama en toda España, el documento del Govern se abstiene de ofrecer conclusiones.
El informe señala que «los costos laborales y salariales en Cataluña han experimentado un crecimiento del 3.8% y un 4.2%, respectivamente, en el primer trimestre del año, superando así la inflación, lo cual refleja una recuperación continua del poder adquisitivo». De hecho, al observar el costo salarial por hora, el aumento es mucho más notable, llegando al 7.3%. El documento sostiene que los incrementos salariales por encima del IPC se mantienen desde el primer trimestre de 2023.
Si se hace referencia al año 2019, antes del brote de la pandemia y la subida de inflación como punto de comparación, se puede notar que la inflación ha sobrepasado el alza en los salarios en Catalunya en 2021, prosiguió en 2022 y aún perduró ligeramente más alta en 2023. La situación en toda España sigue una trayectoria similar, con una brecha un poco mayor entre los salarios e IPC. Por ende, la información presentada en el informe de coyuntura aún no es conclusiva para confirmar la recuperación del poder adquisitivo, pero sugiere que podría suceder pronto.
Los acuerdos han mostrado aumentos del 3% hasta julio, coincidiendo con la disminución en la inflación
Existen otros indicadores que revelan un cambio en la tendencia, tal como la evolución de los acuerdos en España. Según datos del Ministerio de Trabajo actualizados hasta julio, se ha registrado un incremento salarial acumulado de 2,99% en los acuerdos sectoriales y del 2,86% en los empresariales. Sin embargo, la inflación se situó en julio en 2,8%, seis décimas menos que en junio, debido a la disminución en los precios de aceite, fruta y electricidad. Los meses venideros caben crucial importancia para certificar el desaceleramiento de la inflación.
Los números de los acuerdos se ajustan al Acuerdo Interconfederal de Negociación Colectiva (AENC). Se aconseja un aumento del 3% en los salarios para este año y también para 2025 en el acuerdo firmado por los sindicatos CC.OO. y UGT junto con la CEOE. Conforme a un mandato de revisión salarial, si hay un desvío en la inflación, podría haber un aumento adicional de hasta el 1% para cada año del convenio (2023-2025). “Las estadísticas de los acuerdos normalmente son menores en comparación a las que reciben los empleados, debido a que muchos trabajadores no están en convenios o están por encima de ellos”, mencionó Joan Ramon Rovira, líder del gabinete de estudios de la Cambra de Comerç de Barcelona.
Josep Oliver, profesor emérito de Economía Aplicada en la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), destaca otro aspecto importante: no todos recuperan el poder adquisitivo de la misma manera. “En una familia de bajos ingresos, la alimentación puede constituir hasta un 40% de su gasto, en cambio, para una familia de clase media, este porcentaje puede ser del 20%. Los cambios en los precios de consumo tienen un impacto diferente dependiendo del ingreso de cada familia”, reflexiona el economista.
Ambos economistas analizan el incremento del 7,3% en los costos de los salarios por hora en Catalunya y el 7,2% en España, destacando una parte negativa. “Existe el riesgo de que estos crecimientos en los salarios se traduzcan en pérdidas de productividad para las empresas”, aporta Oliver. “Estos aumentos del 7% no son sostenibles a largo plazo”, expone Rovira.
El Govern recuerda que los aumentos de los costos salariales han superado la inflación desde 2023.
De acuerdo con la reciente publicación Perspectiva de Empleo 2024 de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), no se espera una pronta recuperación económica. El informe destaca a España como uno de los países desarrollados donde los sueldos reales han experimentado una mayor caída desde el comienzo de la crisis sanitaria. A pesar de los incrementos salariales que superaron la inflación en 2023 y a principios de 2024, no han logrado equilibrar la disminución del poder adquisitivo de los años anteriores.
El documento indica que los salarios eran todavía un 2,5% inferiores en el primer trimestre de 2024 en comparación con el último trimestre de 2019. Este hecho contrasta con el considerable aumento del 26% en el salario mínimo interprofesional (SMI), que ha beneficiado principalmente a los trabajadores en situaciones más precarias.
Finalmente, el sector de la construcción presenta los mayores incrementos.
El aumento de los costos salariales en Cataluña es liderado por el sector de la construcción, de acuerdo a las estadísticas del Instituto Nacional de Estadísticas. Desde 2019, los salarios han crecido un 26,5%, llegando a un promedio de 18,21 euros por hora en 2023. Esta subida se atribuye a la escasez de trabajadores en este sector. Los servicios vieron un crecimiento del 14,2%, alcanzando los 18,49 euros por hora, durante el mismo lapso de tiempo, mientras que la industria apenas creció un 12,43%, no obstante, mantiene la compensación más alta, siendo 20,59 euros por hora. El incremento promedio en estos tres sectores fue del 14,31%, en comparación al aumento de la inflación en la región autónoma durante ese periodo que fue del 14,44%. A nivel nacional, los servicios experimentaron el mayor crecimiento salarial (14,2%). El salario promedio en España sufrió un ascenso del 13,5%, llegando a los 17,31 euros, y un incremento del IPC para el mismo periodo del 15,3%.
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