Durante la primera mitad del año, la Comunidad Valenciana estableció un nuevo hito en la recepción de turistas extranjeros, llegando a un total de 5.309.844 visitantes internacionales. Este número representa un aumento del 19.9% en comparación con el mismo periodo del año 2023.
Además, estos turistas generaron un gasto «histórico» de 6.436 millones de euros, lo que representa un incremento interanual del 28%.
Se espera que el verano de 2024 sea el de mayor rendimiento para la industria turística valenciana. En este sentido, el gobierno valenciano destacó no solo el impulso del turismo, sino también el mayor crecimiento del PIB, el récord en las afiliaciones a la Seguridad Social, y las recientes inversiones extranjeras anunciadas por el Consell.
Además subrayó «el dinamismo» en sectores económicos esenciales, como la construcción y los servicios.
Este notable desempeño de la economía valenciana coincide con la implementación de acciones económicas desarrolladas por el nuevo Consell para estimular la actividad económica. Entre estas se incluye la propuesta de simplificación administrativa y una menor presión fiscal.
El presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, hizo hincapié en que durante el primer semestre del año, «casi 6.000 valencianos, alicantinos y castellonenses menores de 35 años se han beneficiado de la reducción del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (ITP), lo que les ha supuesto un ahorro medio de 1.400 euros por declarante». La medida en cuestión establecía un tipo reducido del 6% para la adquisición de vivienda habitual para jóvenes menores de 35 años de hasta 180.000 euros, en vigor desde el 1 de enero, en comparación con el 8% previo, una reducción del 25%.
En su evaluación, subrayaron la «robustez» del sector laboral valenciano, que registra el mayor número de incorporaciones durante cuatro meses seguidos en la Comunidad Valenciana, la serie más larga desde que se mantienen registros. Según el Gobierno, esto refleja el «ambiente de seguridad y estabilidad» forjado por el Consell.
No obstante, después de los recientes estadísticas de desempleo y matrícula del mes de julio, la organización empresarial CEV observó que, en un clima donde la estacionalidad y la buena salud económica «propician la creación de puestos de trabajo y la reducción del desempleo», la Comunidad Valenciana se posicionó entre las 10 regiones donde el desempleo estaba en aumento. Este contratiempo en el positivo rendimiento del mercado laboral valenciano fue atribuido a «circunstancias de carácter estacional», pero CCOO-PV se mostró escéptico al respecto, recordando que «la calidad de nuestro mercado productivo instantáneo depende de factores no estacionales, como la disminución del horario laboral acordado, la protección de las condiciones mínimas por medio de un convenio o un compromiso con la intensidad tecnológica y no solo con la mano de obra», puntualizó Juan Carlos Gallart, secretario de Empleo y Política Institucional del sindicato.