Pedro Sánchez, el mandatario de la administración, reveló este miércoles un reciente pacto entre el Gobierno, entidades sociales, sindicatos y empresarios en cuanto a las prestaciones de jubilación y la Seguridad Social. Han estado debatiendo durante meses sobre áreas como la reestructuración de la jubilación parcial, la coexistencia de una pensión y empleo, la cooperación de las asociaciones de mutuas con la Seguridad Social en bajas resultantes de lesiones traumáticas y la determinación de los factores de reducción en trabajos arduos o peligrosos para anticipar la jubilación.
Según Sánchez, el acuerdo alcanzado asegurará un mayor equilibrio entre el trabajo y la pensión, permitiendo “una transición hacia una jubilación adaptable y ajustada a cada individuo”.
Respecto a la jubilación parcial, la extensión es de dos a tres años, disponible a partir de los 62 años, dependiendo de los años extras que cada empleado haya cotizado.
Los requisitos existentes se mantienen; se necesita haber cotizado 33 años y tener una antigüedad de seis años en la empresa.
El nuevo reglamento permite reducir el horario hasta un 75% en los últimos dos años de jubilación parcial e incluye una nueva escala de reducción de hasta el 33% para el primer año.
Además, se mejoran las condiciones del empleado que sustituye a la persona que se jubila, en su mayoría jóvenes, ya que su contrato será indefinido y a tiempo completo en un puesto no amortizable.
En referencia a la industria manufacturera, se extenderá hasta finales de 2029. Además, se implementará un compromiso de cotización progresiva por jornada completa, empezando en 2025 con un 40% y llegando a una cotización del 80% de la jornada en 2029.
Demora en la Jubilación.
Para incentivar a los trabajadores a posponer su retiro, se mantiene un incremento del 4% en la pensión por cada año adicional de retraso en la jubilación. Adicionalmente, se establece un incremento adicional del 2% para aquellos períodos de retraso que superen los seis meses pero que sean menores a un año, esto desde el segundo año de retraso.
Respecto a la jubilación activa, se ha configurado un nuevo marco que permite combinar el trabajo y la pensión de manera más gradual, ajustándose a las circunstancias individuales de cada trabajador. En este sentido, también se elimina el requisito de cotización completa para acceder a este esquema de jubilación, facilitando así su acceso y afectando positivamente en cuestiones de género.
Este tipo de jubilación permitirá la compatibilidad con los incentivos de demora, los cuales se determinarán en base al tiempo que se retrase la jubilación. Es decir, con un año de retraso, se recibirá el 45%, con dos un 55%, con tres un 65%, con cuatro un 80%, y con cinco años se percibirá el 100% de la pensión.
Además, se implementa un nuevo esquema de garantía de pensión, que incrementa conforme el transcurso del tiempo. Esta pensión garantizada empieza con un 45% comenzando desde un año de retraso en la jubilación y llega hasta un 100% para un retraso de cinco años. Adicionalmente, cada año se añadirá un 5% en la pensión debido a la compatibilidad entre el trabajo y la pensión.
Trabajadores indefinidos no fijos.
El pacto incorpora mejorías en los términos de entrada para la jubilación para los empleados con contratos fijos discontinuos, que recuperan el coeficiente multiplicativo de 1,5 utilizado para calcular el periodo requerido para conseguir pensiones por jubilación, incapacidad constante y fallecimiento y supervivencia.
Jubilación en ocupaciones arduas o riesgosas
Se ha progresado en otro asunto, el método para establecer coeficientes reductores de la edad jubilatoria en trabajos particularmente pesados o peligrosos. Estas actualizaciones normativas están firmemente basadas en identificar circunstancias concretas, tales como la frecuencia, persistencia y duración de los procesos de baja médica, así como la declaración de incapacidades constantes y defunciones.
Incapacidad Temporal
Finalmente, se ha conseguido un punto de acuerdo sobre la implementación de lo acordado en el Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC), en lo que respecta a la participación de las Mutuas en la Incapacidad Temporal (IT), en colaboración con los Servicios de Salud Públicos, en la realización de exámenes diagnósticos en afecciones traumáticas, lo cual siempre estará sometido a la voluntad y permiso de los ciudadanos.
Además, los representantes sindicales y el Gobierno han avanzado en trazar una ruta de trabajo que posibilite seguir de cerca los indicadores de IT, acorde a lo establecido en el AENC, con la creación de una comisión de control para rastrear y regular estos convenios y analizar la evolución de la Incapacidad Temporal.
