Finalmente, las anheladas vacaciones de verano han llegado. Es un momento para relajarse, recargar energías y desconectar… pero no de tus finanzas familiares. Las consecuencias de un gasto descontrolado siempre son negativas: más deudas y frecuentemente más conflictos conyugales, lo que podría explicar el aumento de divorcios después de un descanso estival merecido.
Por lo tanto, existen suficientes razones para continuar gestionando tus finanzas personales.
El primer consejo para aprovechar al máximo cada euro gastado en esta y otras circunstancias es «priorizar y categorizar los gastos esenciales, teniendo en mente que los niños deben mantener el mismo estilo de vida que tenían durante el matrimonio», sugiere Adriana Auset, una abogada especializada en derecho de familia, en el podcast Bolsillo.
Sin embargo, afortunadamente, ser económico no necesariamente implica llevar una vida espartana.
Los gastos menores también son relevantes: «La clave no es eliminarlos, sino comprender cuáles de ellos realmente contribuyen a tu felicidad y bienestar, y cuáles puedes omitir», apuntan los autores de Wellness Financiero, Vicenç Yll Escot y Jordi Martínez Llorente. En este aspecto, la divulgadora Natalia de Santiago sugiere comenzar a reducir lo que menos te gusta: comisiones y facturas de servicios y seguros. Este es un área donde existe espacio para ajustes, ya que representa «un ahorro recurrente, y ese es el más beneficioso».
Minimizar los costos de financiamiento es una táctica eficaz, según Javi Linares, asesor financiero. El sugiere poner en práctica la norma 20/4/10 antes de adquirir un auto a plazos, un consejo que también es útil para la compra de una casa. El verano puede ser el momento perfecto para cotejar costos, teniendo en cuenta que las decisiones apresuradas pueden resultar demasiado costosas. Helena Gallardo, abogada experta en derecho inmobiliario, enfatiza que tomar tal decisión sin realizar una auditoría completa es un error significativo.
De materias primas a bitcoins: Inversiones con potencial
Una vez que estableces un fondo de emergencia para imprevistos, es momento de ahorrar y mover el dinero para incrementar su valor. Aunque diversificar siempre es una estrategia acertada, ciertas inversiones pueden ofrecer un potencial superior a otros. Albert Millan, inversor y divulgador, nos advierte del «sesgo cognitivo del costo hundido» cuando se invierte en materias primas, un tipo de inversión con retornos atractivos, pero que requiere una gran tolerancia al riesgo debido a las severas fluctuaciones de precios.
El comportamiento del bitcoin es similar, un recurso que Andrea Redondo, fundadora de El Club de Inversión, asegura que «ha alcanzado menos volatilidad que en sus primeros días ya que está entrando en una fase de madurez», aunque anota que no es apropiado para todo inversor. Afortunadamente, hay opciones de inversión para todos los gustos, incluso para los amantes del jugo de naranja, que ofrece rendimientos sustanciales.
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