Actualmente, España se encuentra en la posición más baja entre los países de la OTAN en términos de gasto en defensa en proporción al PIB. Aunque en años recientes ha habido un aumento en las inversiones, la financiación para la defensa aún está por debajo del compromiso adquirido con la Alianza Atlántica, que es alcanzar un gasto del 2% del PIB para 2029.
Para cumplir con este compromiso, se requiere un esfuerzo presupuestario en los próximos cinco años. La semana pasada, la Autoridad Fiscal (Airef) destacó esta situación y advirtió sobre los riesgos de que el incremento obligatorio en defensa pueda afectar el déficit.
El Gobierno estará obligado a realizar un aumento histórico en el presupuesto militar, especialmente en un contexto de inestabilidad geopolítica, con conflictos en marcha en Ucrania y Oriente Medio y elecciones en Estados Unidos que podrían tener un impacto significativo. España debe fortalecer sus compromisos de defensa en este y los próximos periodos legislativos.
En cuanto a la evolución del gasto militar en España y el presupuesto del Ministerio de Defensa, para el 2022, la industria de defensa, incluyendo aeronáutica, seguridad y espacio, facturó 12.135 millones, tuvo una recaudación fiscal de 2.610 millones, contribuyó con el 1,3% del PIB y generó 210.604 puestos de trabajo.
Nota: Todo esto basado en datos de KPMG y el Plan Presupuestario 2024 de LA VANGUARDIA.
Para el año 2022, la industria de defensa en España, que abarca las áreas de aeronáutica, seguridad y espacio, generó un total de 12.135 millones en ventas, aportando 2.610 millones a la recaudación fiscal y contribuyendo con el 1,3% al Producto Interno Bruto (PIB) del país. Este sector proporcionó también 210.604 empleos. Estos datos provienen de un informe de KPMG y del Plan Presupuestario 2024, publicado por LA VANGUARDIA.
Respecto al gasto militar del país, la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) destacó en su análisis de ejecución presupuestaria que hay distintas maneras de calcular el gasto español en defensa. Según la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), el método más favorable para el gobierno incluye el costo de las necesidades de las Fuerzas Armadas, el gasto en personal, las pensiones de los militares retirados y los civiles que trabajaron en departamentos militares, las actividades civiles-militares y el costo del personal de la Guardia Civil cuando participan en actividades militares. Considerando todos estos factores, la OTAN estima que para el 2024 España habrá gastado 19.723 millones en defensa, equivalente al 1,3% del PIB.
Según las cifras de la OTAN, el desembolso militar de España subió del 0,9% del PIB en 2019, equivalentes a 11.281 millones, al mencionado 1,3%. Para alcanzar el objetivo del 2% en 2029, España necesitará incrementar su inversión en defensa en, al menos, un 50%. En un plazo de cinco años, estos fondos deberán exceder los 30.000 millones, o posiblemente más, dependiendo de cómo evolucione el PIB. Entre 2019 y 2029, España podría casi triplicar su dedicación financiera a la defensa.
Si se considera el presupuesto militar, el gasto necesitaría ser aún más alto. De acuerdo con un informe de la Airef, bajo esta medición, España invirtió un total de 13.630 millones en defensa en 2023, lo que representó el 0,9% del PIB. Esta cifra incluye la modernización de las Fuerzas Armadas, los Programas Especiales de Actualización (PEAs), los desembolsos operativos de los tres ejércitos y las funciones de apoyo logístico.
Finalmente, si se toman en cuenta las cifras de la contabilidad nacional, la inversión en defensa debería duplicarse. La Airef señala que en 2023, España invirtió solo el 1% del PIB en defensa. Si la OTAN acepta este índice, el esfuerzo sería, por lo tanto, inmenso.
La Autoridad Fiscal advierte del riesgo de desvío del déficit debido al compromiso de España con la Alianza Atlántica.
La Airef ha llegado a la conclusión que hay un notable riesgo relacionado con el efecto en el déficit, derivado de las inversiones realizadas en los proyectos de modernización de la defensa nacional. El ente, liderado por Cristina Herrero, advierte que «el volumen de estas inversiones puede influir de manera crecientemente notoria en el déficit». Además, la Airef enfatiza que el Gobierno no proporciona información acerca de las entregas militares del año actual ni las del año pasado. En resumen, denuncia una falta de transparencia por parte del Ministerio de Hacienda y de Defensa al especificar el gasto militar.
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