Windle es de origen camboyano y fue adoptado cuando era un recién nacido por Jerry, un hombre gay. Jordan fue abandonado por sus padres biológicos al nacer.
Jordan Pisey Windle, de 22 años, es uno de los atletas más destacados del equipo de clavados de Estados Unidos en los Juegos Olímpicos de Tokio, un talento que fue descubierto a los siete años.
Jordan Pisey brilla en los Juegos Olímpicos
Windle es de origen camboyano y fue adoptado cuando era un recién nacido por Jerry, un hombre gay. Jordan fue abandonado por sus padres biológicos al nacer y estaba desnutrido al llegar al orfanato de Phnom Penh.
Pero entonces su suerte cambió y la futura estrella del deporte fue adoptada por un ciudadano estadounidense llamado Jerry Windle.
En los años 90, Jerry Windle quería ser padre; sin embargo, en aquel momento las posibilidades de tener una familia eran casi nulas, ya que era un hombre gay y estaba soltero.
Un día leyó una publicación en la que otro hombre soltero había adoptado un niño en Camboya. Al ver que su sueño podía cumplirse, Jerry decidió hacer las maletas y tomar un vuelo directo a Camboya.
En Camboya conoció a Jordan, un niño de 18 meses que se enfrentaba a la malnutrición y a una serie de enfermedades que afectaban a su salud, pero que a pesar de las dificultades a las que se enfrentaba siempre mantenía una enorme sonrisa.
La conexión entre ambos fue inmediata, así que Jerry hizo los trámites de adopción y viajaron de vuelta a casa. A los dos años, Jordan Pisey llegó a Estados Unidos para empezar a cumplir sus sueños con el apoyo de su padre.
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El talento de Jordan se descubrió a los siete años. Tras muchos años de esfuerzo, Jordan Pisey Windle se convirtió en la primera persona de ascendencia camboyana en clasificarse para los Juegos Olímpicos.
Ahora dedica todos sus logros a su padre, del que comparte regularmente fotos en sus redes. Windle se ganó un puesto en el equipo masculino durante las pruebas de 2019 y se clasificó para el equipo olímpico de Estados Unidos en su tercer intento.
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