Leo Messi con un doblete volvió a ser el mejor jugador blaugrana y demuestra que sigue siendo el mejor jugador del equipo.
Hace dos semanas tenía pie y medio fuera del equipo, le obligaron a quedarse y ahora vuelven a ser sus botas por las que pasa todo el juego del Barcelona. Dijo que finalmente se quedaba y que daría el máximo por el equipo de su vida, y de momento parece que su idea es cumplirlo.
Messi vuelve
Salió el Barsa al amistoso contra el Girona con un once donde hasta siete jugadores repetían del amistoso contra el Nastic, parece que Koeman empieza a tener una idea clara de cual va a ser su once de gala.
Sergi Roberto por delante de piqué, galones para De Jong compartiendo medular con Busquets y continuidad para Coutinho, parece que este año puede ser la redención del Brasileño.
Amistoso contra el Girona
El primer tiempo dejó buenas y malas noticias en el equipo culé, Coutinho fue uno de los mejores de los primeros 45 minutos, un gol y un balón a la madera lo avalan, Araújo parece que puede asentarse como una buena alternativa para el puesto de central, donde el Barcelona anda muy escaso teniendo en cuenta la edad de Piqué y que Umtiti esta mas fuera que dentro y Messi, simplemente volvió a ser Messi, un pase mágico en el primer gol y un derechazo al fondo de la red le basto para que su equipo se fuese al descanso con una ventaja en el marcador de 2-1. La peor noticia para el cuadro barcelonista fue De Jong, errático, fue una máquina de perder balones y uno de ellos propició el gol del Girona, no parece cómodo en el doble pivote con Busquets y en el club esperan que esta temporada asuma los galones por los que el club desembolsó muchos millones el verano pasado, veremos que pasa.
El segundo periodo nos dejo con el gol que otorgaba el doblete a Messi y poco más, muchos cambios y un Barsa que decidió dormir el partido acabaron por hacerlo y el marcador no se movió más, 3-1 y a casa.
No pinta mal este Barcelona del Holandés Koeman, Messi parece decidido a ser el de siempre, pero falta por ver si la inestabilidad del club, la pugna por su presidencia y la negación a Messi de cumplir con su deseo de marcharse a otro proyecto no acaban pasando factura al equipo a lo largo de la temporada, que se antoja con mas incertidumbres que certezas.