DiverXO se ha convertido en el restaurante más caro de España. Su dueño, Dabiz Muñoz, es el mejor cocinero del mundo según The Best Chef Awards 2021.
Temas cubiertos
DiverXO se ha convertido en el restaurante más caro de España. Su dueño, Dabiz Muñoz, es el mejor cocinero del mundo según The Best Chef Awards 2021.
Restaurante más caro de España
El cocinero madrileño, que atesora tres estrellas Michelin y tres soles Repsol, ha convertido su restaurante DiverXO en el más caro de España.
El precio del menú pasará de los un 46% el precio del menú degustación, pasando de 250 euros a 360.
El propio Dabiz Muñoz ha sido el encargado de comunicar la decisión. «Queremos que la gente tenga las condiciones laborales óptimas«, expresa el cocinero tras anunciar este cambio de precios en su restaurante DiverXo.
A partir de enero de 2022, un 46% el precio del menú degustación, pasando de 250 euros a 360.
A este precio hay que sumarle, en caso de que el comensal lo desee, una selección de vinos, a cargo del sumiller Miguel Ángel Millán. por 150 euros por persona, o un maridaje que denominan de altos vuelos a 300 euros por persona. Se convierte con esta importante subida de precio en el restaurante más caro de España.
DiverXO ya tenía hasta ahora uno de los precios del menú degustación más elevados, con 250 euros. Por delante, con 290 euros, está el restaurante de Martín Berasategui, en Lasarte (Guipúzcoa), al que si se desea se puede añadir los 160 euros que cuesta la armonía de vinos. El otro tres estrellas que Berasategui tiene en Barcelona, Lasarte, dentro del hotel Monument, de cuya cocina se ocupa el cocinero Paolo Casagrande, ofrece un menú degustación por 250 euros.
Subida del precio para rentabilizar el restaurante
El restaurante, reconoció el cocinero en una entrevista concedida a CincoDías hace unos meses, «no es rentable de puertas para adentro. Luchamos para que sea lo comido por lo servido. Es la cúspide de lo que hacemos, lo más aspiracional e internacional que tenemos. El mejor DiverXO está por llegar». Y es que la crisis de abastecimiento, unido -o más bien producido- por la pandemia, ha hecho subir los precios a las materias primas. Además, la hostelería tiene que recuperar el tiempo que estuvo cerrada debido a las recomendaciones sanitarias para frenar los contagios.