Los fieles rinden homenaje al papa Francisco en su última morada en Roma.
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La apertura de la basílica para los fieles
La basílica de Santa María la Mayor, uno de los templos más emblemáticos de Roma, ha abierto sus puertas para permitir que los fieles visiten la tumba del papa Francisco.
Este acto se lleva a cabo tras un funeral que reunió a miles de personas, quienes se despidieron del pontífice argentino. La tumba, ubicada en un lugar de honor dentro de la basílica, ha atraído a numerosos devotos que desean rendir homenaje al líder espiritual que dejó una huella imborrable en la Iglesia Católica y en el mundo.
Detalles del sepulcro del papa Francisco
El sepulcro del papa Francisco es una sencilla lápida de mármol proveniente de la región de Liguria, en el norte de Italia, que lleva inscrito su nombre pontificio en latín: FRANCISCUS. Este diseño austero refleja la humildad que caracterizó su papado. Además, en la pared cercana se ha colocado una reproducción ampliada de su cruz pectoral, un símbolo de su fe y dedicación. La elección de una tumba a nivel del suelo, sin ostentaciones, resalta su deseo de cercanía con el pueblo, un principio que guió su vida y ministerio.
La devoción del papa Francisco a la Virgen María
El papa Francisco siempre mostró una profunda devoción hacia la Virgen María, especialmente hacia el icono de la Salus Populi Romani, que se encuentra en la misma basílica. En su testamento, el pontífice expresó su deseo de ser enterrado en este lugar, lo que refleja su conexión espiritual con la Virgen y su deseo de estar cerca de ella incluso en su descanso eterno. Este acto de fe ha resonado profundamente entre los fieles, quienes ven en su elección un ejemplo de humildad y devoción.
Un legado que perdura
La tumba del papa Francisco no solo es un lugar de descanso, sino también un símbolo de su legado. La basílica de Santa María la Mayor, que no ha sufrido modificaciones estructurales para albergar su sepulcro, continúa siendo un lugar de peregrinación y reflexión. Los fieles que visitan este sitio no solo rinden homenaje a un papa querido, sino que también se conectan con los valores de amor, paz y servicio que él promovió durante su vida. La presencia del papa Francisco en este histórico templo asegura que su mensaje perdure en el tiempo, inspirando a futuras generaciones a seguir su ejemplo de compasión y dedicación.
