Un evento que fusiona la música barroca y la ópera en un ambiente único

Temas cubiertos
Un cierre musical excepcional en Peralada
El festival de Pascua de Peralada ha culminado con un concierto matutino que ha dejado huella en los asistentes. Este evento, que se ha convertido en un referente de la música sacra en el Mediterráneo, ha logrado una ocupación del 95%, agotando las entradas en la mayoría de sus conciertos.
La dirección artística de Oriol Aguilà ha sido clave para ofrecer un programa que combina lo mejor de la música barroca con la ópera del siglo XVIII, creando una experiencia única para el público.
Artistas de renombre en el escenario
La mezzo sueca Ann Hallenberg y la soprano Mélissa Petit han sido las protagonistas de este evento, interpretando sendos ‘Salve Regina’ de Domenico Scarlatti y Leonardo Leo. La calidad de las interpretaciones ha sido sobresaliente, destacando la profundidad emocional y la técnica vocal de ambas artistas. Este año, el festival ha logrado mantener un ambiente de respeto y silencio, permitiendo que la música resuene en la iglesia del Carme como un verdadero templo de espiritualidad.
Innovaciones y proyectos para el futuro
El festival no solo ha sido un éxito en términos de asistencia, sino que también ha presentado innovaciones significativas. La acústica de la iglesia ha mejorado notablemente, lo que ha permitido que cada nota se escuche con claridad. Además, se ha anunciado un nuevo encargo de Responsorios a un compositor local, lo que promete enriquecer aún más la programación de futuras ediciones. La inclusión de Vox Luminis, un ensemble belga, en la próxima edición, traerá una visión histórica del Réquiem alemán, explorando la polifonía de compositores barrocos alemanes.