Explorando la vida de un apasionado del deporte y su impacto en la sociedad victoriana.

Temas cubiertos
Un personaje fascinante de la época victoriana
John Dugdale Astley, nacido el 19 de febrero de 1828 en Roma, fue un destacado personaje de la época victoriana que dejó una huella imborrable en el mundo del deporte. Hijo de un baronet y descendiente de un líder militar de la Guerra Civil Inglesa, Astley tuvo una educación privilegiada en instituciones como Winchester, Eton y Oxford.
Sin embargo, su vida estuvo marcada por las deudas de juego, lo que lo llevó a abandonar la universidad y a buscar su camino en el deporte.
Un aventurero con múltiples pasiones
Desde joven, Astley mostró un gran interés por diversas disciplinas deportivas.
Practicó boxeo, cricket, atletismo, remo e hípica, y su amor por la caza lo llevó a Suiza, donde exploró nuevas aventuras. A los 21 años, comenzó a viajar por Europa, visitando lugares como Gibraltar, Sevilla y Madrid, donde participó en competiciones de atletismo. Su espíritu aventurero lo llevó a enlistarse en el ejército británico, donde su vida tomaría un giro inesperado.
La guerra y el deporte: un vínculo inquebrantable
En 1854, Astley fue enviado a la guerra de Crimea, donde participó en la batalla de Alma y resultó gravemente herido. A pesar de su recuperación, decidió regresar al frente, donde continuó organizando competiciones deportivas entre soldados. Su pasión por el deporte no conocía límites, y fue conocido por su capacidad para unir a soldados de diferentes nacionalidades a través de competiciones de boxeo, natación y atletismo.
Un legado en el mundo de las carreras de caballos
Tras dejar el ejército en 1859, Astley se dedicó por completo a las carreras de caballos, compitiendo bajo el pseudónimo de S. Thellusson. Su vida estuvo marcada por la crianza y entrenamiento de caballos, así como por su afición a las apuestas, que a menudo lo llevaron a la ruina. Sin embargo, su pasión por el deporte nunca disminuyó, y continuó organizando eventos deportivos hasta el final de su vida.
Un político y un autor
En 1873, Astley fue nombrado baronet y se convirtió en juez de paz. Su carrera política lo llevó al parlamento en 1874, donde defendió los intereses conservadores, aunque no logró mantener su escaño en las elecciones de 1880. A pesar de sus altibajos, su legado perdura, especialmente tras la publicación de sus memorias, «Cincuenta años de mi vida en el mundo del deporte en casa y en el extranjero», que se convirtió en un gran éxito.
Reflexiones finales sobre un pionero del deporte
John Dugdale Astley falleció el 10 de octubre de 1894, pero su influencia en el deporte y la cultura victoriana sigue viva. Su vida es un testimonio de cómo el deporte puede unir a las personas y trascender fronteras, un legado que continúa inspirando a generaciones. La historia de Astley nos recuerda la importancia de la pasión y la dedicación en la búsqueda de nuestros sueños.