La atleta gallega se consagra campeona de Europa en pista cubierta con un salto impresionante.

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Un salto hacia la gloria
Ana Peleteiro, la destacada atleta gallega, ha vuelto a hacer historia en el Campeonato de Europa en pista cubierta celebrado en Apeldoorn, Países Bajos. Con un salto impresionante de 14,20 metros, logró posicionarse en el primer lugar de la final de triple salto, consolidando su estatus como una de las mejores en su disciplina.
Este triunfo marca su octava medalla en campeonatos internacionales y su segundo título continental bajo techo, tras haberlo conseguido previamente en 2019.
Peleteiro, conocida por su competitividad y determinación, no se dejó intimidar por un primer intento nulo que quedó a menos de un centímetro de ser válido.
En su segundo salto, ajustó su técnica y logró una marca que la colocó en la cima de la competencia. La atleta, que ha enfrentado desafíos personales en los últimos días, demostró que su fortaleza mental es tan impresionante como su habilidad atlética.
Un cambio de rumbo en su carrera
Este año, Ana ha realizado cambios significativos en su vida y carrera. Se mudó de Guadalajara a Ribeira y decidió trabajar con su nuevo entrenador, Benjamín Campaoré, quien también es su esposo. Juntos han implementado una nueva técnica que busca optimizar su rendimiento y minimizar el riesgo de lesiones. “Estamos intentando saltar de forma más horizontal y mejorando la técnica, que era algo que se me atravesaba desde hace años”, comentó Peleteiro, resaltando la importancia de la técnica en su desempeño.
La atleta de 29 años ha encontrado en Campaoré un gran apoyo, confiando en su criterio y planificación. Este cambio ha dado sus frutos, ya que Ana ha logrado mantener un alto nivel de competencia, destacándose en cada evento en el que participa. Su enfoque en la salud y la longevidad en el deporte es un testimonio de su madurez como atleta.
Un triunfo mediático y emocional
El triunfo de Peleteiro no solo fue un logro deportivo, sino también un evento mediático. A pesar de que Televisión Española optó por transmitir un partido de fútbol en lugar de su calificación, la atleta no dejó que esto afectara su rendimiento. En la final, logró un salto de 14,37 metros, su mejor marca de la temporada, lo que demuestra su capacidad para brillar bajo presión.
La emoción de Ana al recibir la medalla fue palpable, llevándose la bandera española al cuello y celebrando su victoria con fervor. “Ahora voy a por todas en el Mundial de Nanjing”, afirmó, mostrando su ambición y deseo de seguir cosechando éxitos. Con su mirada puesta en el futuro, Peleteiro se prepara para enfrentar nuevos desafíos y continuar su camino hacia la grandeza en el atletismo.