La emblemática residencia de Hidden Hills se ofrece por 13,5 millones de dólares.
Temas cubiertos
Un hogar lleno de recuerdos
La mansión de las Kardashian-Jenner, situada en el exclusivo vecindario de Hidden Hills, California, ha sido el escenario de innumerables momentos memorables desde que el reality show ‘Keeping Up with the Kardashians’ comenzó a emitirse en 2007.
Esta casa, que ha sido testigo de dramas familiares, celebraciones y la evolución de una de las familias más influyentes del mundo, ahora está en el mercado por 13,5 millones de dólares. Kris Jenner, matriarca del clan, ha decidido vender la propiedad que ha sido su hogar durante más de una década.
Características de la mansión
La propiedad cuenta con seis habitaciones y ocho baños, además de una suite principal que incluye chimenea, bar y gimnasio privado. La cocina, diseñada por la prestigiosa marca francesa La Cornue, es un sueño para cualquier amante de la gastronomía, con una isla central y electrodomésticos de lujo. El patio trasero es otro de los grandes atractivos, con piscina, jacuzzi y un área de barbacoa al aire libre, ideal para las extravagantes fiestas que caracterizaban a la familia.
Un nuevo capítulo para la familia
Kris Jenner ha expresado su emoción por la venta de la casa, señalando que ha compartido recuerdos inolvidables con su familia en este lugar. La decisión de vender la mansión marca el fin de una era, pero también abre la puerta a nuevas oportunidades. La familia Kardashian-Jenner ha sabido reinventarse a lo largo de los años, y su reality show continúa en Hulu, donde siguen compartiendo su vida llena de glamour y drama con el mundo.
Un legado en la cultura pop
La mansión no solo es un hogar, sino un símbolo de la cultura pop. Ha sido el escenario de momentos icónicos del programa, como el famoso regalo de un cerdo a Kylie Jenner. Tomer Fridman, agente inmobiliario que representa a Kris en la venta, destaca que esta casa ha sido el ancla de la familia, un lugar donde han vivido tanto buenos como malos momentos. La venta de la mansión es un recordatorio de cómo la familia ha crecido y cambiado a lo largo de los años.
