Cierre de negocios y escuelas en protesta por las políticas migratorias de Trump
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Un día de protesta en Estados Unidos
El lunes pasado, decenas de negocios en Estados Unidos se unieron al llamado de protesta bajo el lema “Día sin inmigrantes”, en respuesta a las políticas migratorias implementadas por la administración del presidente Donald Trump.
Esta movilización, que recuerda a la organizada en febrero de 2017, busca visibilizar la importancia de la comunidad inmigrante en la economía y la sociedad estadounidense.
Impacto en la educación y el comercio
Según reportes de medios nacionales, al menos 250 negocios cerraron sus puertas en solidaridad con la protesta.
En el sur de California, varios distritos escolares registraron un notable aumento en las ausencias de estudiantes. Una maestra de una escuela primaria en Los Ángeles mencionó que aproximadamente 390 de 670 alumnos no asistieron a clases, con muchos padres justificando la ausencia por la participación en la protesta.
Además, pequeños comercios operaron con personal reducido, ya que muchos empleados decidieron unirse a la movilización. En Washington, por ejemplo, varios trabajadores de una cafetería en el Senado no se presentaron a sus labores, reflejando el impacto de esta jornada en diferentes sectores.
Voces de la comunidad inmigrante
Las historias de quienes participaron en la protesta resaltan el deseo de crear conciencia sobre los derechos de los inmigrantes. Ana Cacatci, una de las manifestantes en Chicago, expresó: “Mis padres emigraron aquí para que tuviéramos una vida mejor. Estamos aquí solo para trabajar y queremos hacer esto por nuestros padres y nuestra gente”. Este tipo de testimonios subraya la conexión emocional y la motivación detrás de la protesta.
La economía y el futuro de la fuerza laboral
Víctor Narro, director de proyectos del Centro Laboral de UCLA, enfatizó que la economía estadounidense dependerá cada vez más de la fuerza laboral inmigrante, especialmente en un contexto de envejecimiento poblacional y disminución de las tasas de natalidad. La movilización del lunes no solo fue un acto de resistencia, sino también un recordatorio de la relevancia de los inmigrantes en el tejido económico del país.
Un llamado a la acción
El llamado a la acción que circuló en redes sociales instó a los inmigrantes a faltar al trabajo, no enviar a sus hijos a la escuela y abstenerse de realizar compras. Esta estrategia busca demostrar el impacto que tiene la comunidad inmigrante en la vida cotidiana de Estados Unidos. A medida que las políticas migratorias se endurecen, la comunidad se une para hacer escuchar su voz y reivindicar sus derechos.